El debate

Así es, porque lo que vimos ayer fue un ejercicio de civilidad entre los cinco candidatos a la Presidencia de la República, durante el cual imperó el respeto y el comedimiento, acaso algo falto de novedad porque prácticamente fue una repetición de argumentos ya dichos muchas veces.

Que el más criticado fue Andrés Manuel López Obrador era lo esperado, pues lo natural es que se trate de bajar a quien va arriba, pero quizás muchos se hayan decepcionado de ver a un Jaime Rodríguez “El Bronco” ecuánime, con cierta elocuencia y sobre todo amable sin proferir ningún exceso verbal, sin dar show, pues.

José Antonio Meade simplemente cumplió, mientras que Ricardo Anaya fue el más pulcro en sus intervenciones y de hecho fue el que mejores menciones tuvo en los "post-debates", con todo y que no logró completamente “enganchar” a López Obrador… Margarita Zavala batalló para mostrarse serena y como que no consiguió ubicarse del todo.

Los moderadores, Azucena Uresti, Denise Maerker y Sergio Sarmiento estuvieron impecables en el manejo de los tiempos y con sus preguntas, aunque con sus actitudes los candidatos no les exigieron mucho… 

En fin, fue un muy buen ejercicio que mantuvo la atención del público y en el que cada quien pudo hacerse una imagen mental de cómo sería cada candidato ya como presidente.

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NO HUBO NOCAUT

Dice el conocido publicista Carlos Alazraki que en un debate presidencial el candidato ganador puede aspirar a elevar hasta en cuatro puntos su preferencia, pero solamente si gana por nocaut, es decir, que su triunfo sea tan evidente y contundente que merezca la unanimidad incluso hasta en buena parte de quienes no piensan votar por él.

Fue notorio que en este primer debate presidencial de 2018 no hubo un ganador así tan contundente, aunque Anaya fue nombrado como ganador en varios de los llamados “post-debates” y en redes sociales se ganó muy buenos comentarios, por lo que habrá que estar atentos a ver en cuánto se alcanzan a mover las preferencias en los días siguientes.

Claro, estarán por verse los restantes dos debates, el siguiente en la ciudad de Tijuana el 20 de mayo y el último el 12 de junio en Mérida, Yucatán, donde seguramente las enseñanzas de este primer encuentro serán aprovechadas para hacer ajustes de estrategias y se vean resultados diferentes.

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EL OTRO DEBATE

El otro debate que debería darse en el Senado de la República es sobre la eliminación del fuero, porque es otro tema enteramente electorero que en términos reales podría traer ningún beneficio en tanto no haya una legislación que realmente permita castigar los actos de corrupción en el servicio público.

Como ya se ha comentado hasta el cansancio, en el fondo la corrupción queda impune en México porque las leyes tienen más huecos que un cerco viejo por el cual los malos funcionarios evaden las escasas ocasiones en que son perseguidos, así que aun sin fuero nada garantizará que haya castigos mientras no exista voluntad de cambiar la legislación.

Además, suponiendo que se llegue a la eliminación del fuero, quizás salga peor el remedio que la enfermedad pues a cualquier funcionario, desde la oposición o por “fuego amigo”, se le podrá traer “empapelado” con decenas de denuncias en su contra, todas las cuales tendrá que agotar con el consecuente costo en dinero y en tiempo…

En fin, todo esto del fuero está por verse.

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¿SERÁ INGENUIDAD?

A propósito de castigos a la corrupción y de cambios a las leyes para ello, el presidente del Consejo Ciudadano del Sistema Estatal Anticorrupción de Sonora, Alberto Haaz Díaz, comentó que prácticas como el uso indebido de los vehículos oficiales ahora se tipifican como faltas graves y, por ejemplo, a quien se agarre llevándose el carro a recoger niños a la guardería o de compras se le puede multar o incluso ser despedido.

Comentó Haaz también que si un empresario es descubierto pagando sobornos a funcionarios para asegurar licitaciones se le prohibirá que participe en los siguiente concursos, pero como se busca sanear de fondo esas relaciones de contubernio, la idea es que ya no se manejen pagos en efectivo sino que todas las operaciones sean por medio de cajeros o Internet y así no intervengan personas y ya no haya mochadas.

¿Creerá de veras el presidente de este Consejo Ciudadano que con medidas de este tipo van a abstenerse de corruptelas los funcionarios acostumbrados a la mochada?… ¿Será ingenuidad?

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DEFINICIÓN EN CAJEME

Por si había quienes dudaban del apoyo pleno de Eduardo y Ricardo Bours Castelo a la candidatura independiente por la Presidencia Municipal de Cajeme de su hermano Rodrigo Bours Castelo, durante el fin de semana se dio en Ciudad Obregón una reunión en su apoyo en la que participaron los primeros, además de conocidos liderazgos identificados en el “Yaqui Power” como Abel Murrieta, Teresita Caraveo y Adrián Esquer, entre otros.

¿Significa esto un deslinde total de estos personajes con el PRI?

Quizás ni siquiera tenga que hacerse una declaración al respecto, porque según los estatutos priistas cualquier militante que apoye a otro candidato que no sea del partido se gana la separación inmediata y la pérdida de sus derechos partidistas.

Dicen que estas son épocas de definiciones y parece que los mencionados ya tomaron una decisión, aunque serán ellos mismos los que tendrán que aclarar su situación partidista.

mrx@expreso.com.mx