Nigeria, Somalia, Sudán del Sur y Yemen en riesgo por muertes por hambre

hambre en el mundo 28042017r09

ROMA.- La Organización de Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y el Programa Mundial de Alimentos (PMA) han pedido a la comunidad internacional redoblar esfuerzos para evitar más muertes por hambre en el noroeste de Nigeria, Somalia, Sudán del Sur y Yemen.

"Ya han muerto muchas personas", advirtió el director general de la FAO, José Graziano da Silva, en una reunión informativa al margen del Consejo de la FAO, el brazo ejecutivo del órgano de gobierno de la FAO.
"La paz es, por supuesto, la clave para poner fin a estas crisis – añadió -. Pero incluso en épocas de conflicto, podemos hacer mucho para combatir el hambre y evitar la hambruna (...) Visité Maiduguri, en el noreste de Nigeria, y comprobé personalmente lo poderoso que puede ser el apoyo agrícola puede ser en una crisis humanitaria.

En algunas zonas de Sudán del Sur se ha declarado formalmente la hambruna, mientras que el noreste de Nigeria, Somalia y Yemen están al borde de caer en esta situación. En conjunto, 30 millones de personas luchan a diario por conseguir alimentos suficientes.

"Tenemos que llegar a las personas hambrientas para evitar que mueran", aseguró por su parte el nuevo director ejecutivo del PMA, David Beasley.
"Tenemos la fuerza, la capacidad logística y la tecnología para esta tarea. Lo que necesitamos son los recursos y acceso a las personas que están al borde de la hambruna y, ahora, no más adelante. Sin este apoyo, tendremos que tomar decisiones difíciles sobre quién recibirá alimentos, y quién no".

Déficit de financiación
Los responsables de la FAO y del PMA subrayaron que las operaciones de respuesta a la hambruna de ambos organismos sufren de un grave déficit de financiación, y que debe producirse un aumento inmediato y sustancial de los recursos para salvar vidas y medios de subsistencia.

El conflicto es el hilo conductor de la crisis que sufren los cuatro países afectados. La FAO y el PMA trabajando con urgencia y en estrecha cooperación la emergencia en estas zonas para evitar que la hambruna se extienda aún más.

Por ejemplo, en Sudán del Sur, la FAO y el PMA forman parte de un plan de respuesta rápida interinstitucional que aporta alimentos que salvan vidas, junto a material para la pesca y el cultivo de hortalizas y otros servicios de socorro destinados a las comunidades de difícil acceso amenazadas por la hambruna.

En el noreste de Nigeria, los dos organismos colaboran para garantizar que las personas que se enfrentan al hambre reciban tanto ayuda alimentaria para satisfacer sus necesidades inmediatas como apoyo para poder producir sus propios alimentos.

El material para la producción alimentaria cuesta menos de 90 dólares, pero puede proporcionar alimentos suficientes para una familia de ocho personas durante seis meses.

NTX/I/MOB/MGT/RG