Construir la felicidad
El próximo 20 de marzo estaremos conmemorando el Día Internacional de la Felicidad, fecha instaurada desde 2013 por la Organización de las Naciones Unidas, como un reconocimiento a lo relevante que resulta la felicidad y el bienestar como aspiración para todos los seres humanos y la importancia de su inclusión en las políticas públicas.
El hablar del tema resulta complejo, pues parece que cada uno de nosotros entendemos el concepto desde diferentes enfoques, pero según un estudio de la Universidad de Harvard, hay algunos elementos que debemos considerar y que nos permitirán lograr vidas más plenas.
Las personas felices tienen su manera de pensar, su propia actitud frente a la vida y los demás, sus propias reacciones frente a lo que les ocurre y sobre todo, su manera muy particular de relacionarse con otros, lo que les ayuda a mantener un estado de felicidad más duradero.
Una de las grandes conclusiones del estudio de Harvard, que ya cuenta con 75 años de generar información, señala que el poder del amor no debe ser subestimado, pues es una clave importante en la receta de la felicidad, por lo que debemos encontrar a quien dé realmente sentido a nuestra vida. Una relación positiva significa que es el lugar donde te sientes seguro y en el que puedes ser tú mismo.
En segundo lugar, la amistad y la familia son sumamente importantes para nuestro bienestar y felicidad. Existe evidencia científica que afirma además que la buena relación con los compañeros
de trabajo, tiene un efecto positivo que también puede contribuir a que alcancemos nuestra plenitud. Waldinger , responsable
actual del proyecto, señala:
“Nuestro estudio ha demostrado que la gente a la que le va mejor es aquella que se apoya en las relaciones con su familia, amigos y con la comunidad”.
Adicional a esto, se sugiere evitar el consumo de alcohol y/o drogas, pues esto afecta la salud, lo cual es un indicador que tiene una relación muy estrecha con la capacidad de ser felices.
Un organismo cansado y enfermo, no permite gozar completamente de las relaciones que nos rodean y realizar las actividades que nos apasionan.
La felicidad tiene mucho que ver además, con la manera en que interpretamos el mundo y, por tanto, con nuestra manera de pensar.
Hay personas que pueden ser muy infelices durante años, derivado de una mala experiencia o un duelo mal manejado, imposibilitando con ello el reconocer las alegrías cotidianas y los logros del día a día.
Esas son solo algunas de las conclusiones del estudio que ha demostrado por años que la felicidad es algo más complejo que acumular riqueza o vivir bajo las normas que nos dicta la moral social.
La felicidad es una decisión que tomamos todos los días, en ocasiones de manera inconsciente, teniendo un impacto en todo aquello que
nos rodea. Es algo que construimos en lo individual y colectivo, dándole sentido a nuestra existencia.
Celebrar el Día Internacional de la Felicidad en medio de una pandemia mundial que ha sacudido la realidad como la conocíamos, no solo es revolucionario, sino urgente. Debemos hacer consciente que todas las decisiones que tomemos deben conducirnos a ser felices, pues es esa, la razón de de vivir. ¡Celebremos la felicidad!
La autora es Directora de Grameen de la Frontera y profesora de la Escuela de Negocios del Tecnológico de Monterrey Campus Sonora Norte. @PaulaTakashima