Los días se pasan rápido
Ayer me puse a recordar lo último que hice previo al inicio del aislamiento a causa del coronavirus a nivel estatal. Debo de admitir que me divertí muchísimo entre varios eventos que pasaron durante ese fin de semana lleno de diversión, compañía y sobre todo, música.
Ahora, los días pasan tan rápido que muchos de nosotros nos limitamos de nuestra casa a la “chamba”, o de la “chamba” a la casa. No es que presuma que salía a menudo, pero no faltaba la
comida o la juntada con camaradas donde aprovechaba la oportunidad de convivir.
A pesar de que no ha habido limite para platicar con nuestros amigos gracias a las video llamadas, donde sacamos las mejores carcajadas y platicamos echando el café. A pesar de encontrarnos
distanciados, estamos más unidos que nunca.
El tiempo que nos encontramos viviendo me ha enseñado a valorar lo importante que es tener la oportunidad de hacer de nuestro día, tener una historia que contar y agradecer que una vez más logramos ir a nuestro trabajo y desarrollarlo de manera eficiente.
Me encanta observar cuando voy por la calle que muchos van con toda la actitud. Claro, con los cuidados necesarios, pero dispuestos a sacar el día. A pesar de la situación, debemos ver por
donde salir hacia delante.
Aunque los días se nos hagan un segundo o que hagamos nuestras actividades de manera rutinaria, más de lo que ya era, saquemos nuestra mejor actitud y sigamos saliendo adelante.
Esto tarde o temprano se acaba, saldremos adelante. El autor es licenciado en Ciencias de la comunicación