No hay cuarentena para la boca

El autor es Odontopediatra por la UANL.

Nuestros hábitos en estos momentos tan importantes nos definen, hemos roto la rutina y el quedarnos en casa nos  hace olvidarnos de lo que hacemos cotidianamente durante los días, como lo es por ejemplo el cepillado dental y mantener una dieta balanceada.

Nos cepillamos los dientes al despertarnos o justo después de desayunar, después de la hora de la comida y antes de ir a la cama, pero ahora que pasamos la mayor parte del tiempo en casa se nos olvida o lo dejamos, por hacer otras actividades, en especial los niños, que para muchos de ellos es complicado lograr que se cepillen sus dientes o

utilicen el hilo dental en un horario bien establecido.

Con estas medidas de permanecer en casa se llega a complicar un poco más y estos cambios, si no ponemos atención pudieran generar un problema de caries que después se convertiría en dolor dental o inflamación con sangrado de las encías.

Siguiendo las medidas recomendadas por la Secretaría de Salud, muchos de mis colegas y yo hemos reducido nuestra consulta dental, limitando la atención a casos en los que el niño presente dolor, y he notado que han aumentado las urgencias por este motivo.

Pienso que los  padres en esta situación se están dando cuenta más del comportamiento de sus hijos en la casa, sus

hábitos de higiene, y sobre todo, si los pequeños tienen algún malestar que esté relacionado con su dentadura.

Me gustaría hacer una invitación para aprovechar estos días en los que vamos a estar más juntos en casa para practicar cepillado, el uso del hilo dental, probar algún enjuague bucal nuevo que en ocasiones por las prisas de todos los días no podemos lograr.

Conocer la boca de nuestros hijos, sus colores y las marcas de sus dientes sanos, o que ya tengan una restauración,

o tal vez ese hoyito que alguna vez vimos y habíamos olvidado. Es una oportunidad de conocerlos más como personas, dónde se queda acumulada la comida, qué les molesta, qué instrumento de su higiene se pudiera mejorar y por qué no, qué nuevo sabor de pasta pudiéramos encontrar.

Igualmente, encontrar en la prevención un arma súper importante en la salud bucal, las visitas frecuentes con el Odontopediatra, pedirle consejos para hacer que la boca y la salud en general de los pequeños esté de lo mejor

y no dejarlo para cuando haya alguna molestia o dolor que necesite un tratamiento más invasivo.

El autor es Odontopediatra por la UANL.

jafavelac@gmail.com