¿Qué hacer y qué no hacer durante la cuarentena?

Hasta el sufrimiento, cuando se le encuentra sentido, deja de serlo. Si eres como la mayoría, te “pica” la casa y quieres andar fuera. Sin embargo, es prudente quedarse en casa. Así que las preguntas son: ¿qué hacer y qué no hacer en mi casa mientras dura la cuarentena?

La imaginación es tu único límite. El tiempo en casa puede ser un gran pretexto para convivir en familia, sacar adelante algunas ideas que tenías guardadas, reencontrarte, en fin. Comencemos por “qué no hacer”.

Muchas personas quieren estar todo el día en Internet, revisando las novedades acerca del coronavirus, por lo que están al pendiente de páginas de noticias, principalmente.

Y cuando una persona está tan al pendiente de ese tipo de noticias, contamina su mente, y esto aumenta la preocupación y el estrés. No digo que no estés al pendiente, es bueno enterarse. Pero estar cada cinco minutos revisando las noticias, no hará mucha diferencia en el cuidado que puedes tener, y sí hará mucha diferencia en tu paz mental (o falta de ella), además de que perderás oportunidades para hacer cosas productivas y/o de valor.

Además, ¿te ha pasado que no has hecho nada aparte de estar en el celular, y te sientes más cansado (a) que si hicieras algo? Pasar demasiado tiempo en el celular, sin hacer otra cosa, consume tu energía y aumenta tu apatía. Entonces, ¿qué sí hacer? La lista puede ser larguísima y todo cuenta.

Desde ver series con tu familia para promover la unión, hacer manualidades, entretenerse con juegos de mesa, inventar juegos, hasta grabar “tiktoks”, sí, videos en esa red social que todas las personas hemos criticado.

Me tocó ver hace un par de días una nota de un niño agradeciéndole a su papá por haber grabado un video en Tik Tok con él, y la nota cerraba con un “Te quiero mucho”. Quizás existan cosas que para ti son insignificantes, pero que las personas que amas sí valoran.

También podemos aprovechar el tiempo libre para leer, escuchar audiolibros, ver tutoriales o cursos en Internet para aprender nuevas habilidades, meditar, hacer ejercicio, sorprender a tu familia, o a ti mismo (a) con nuevos platillos y postres, hacer “lluvia de ideas” sobre posibles proyectos, ordenar la casa, deshacerse de todo lo que ya no sirve, y un gran etcétera.

Obviamente también habrá momentos de aburrimiento, pero si se logra un buen equilibrio, quizás sean pocos, y de esta cuarentena pudiera resultar algo muy positivo, que no hubiera sido posible de no ser por una situación “trágica” como la que estamos viviendo.

Se vuelve a comprobar lo que en su momento dijo Viktor Frankl: Hasta el sufrimiento, cuando se le encuentra sentido, deja de serlo, por lo que a esta cuarentena le podemos encontrar sentido: aprendizaje, lecciones por aprender y reforzamiento de áreas de oportunidad en general. Así que, en la medida que sea posible, ¡te deseo que la disfrutes!

El autor es escritor, capacitador, conferencista y Life Coach en SB3.

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