Retos formativos de los jóvenes en casa
El Covid-19 ha impactado de manera significativa varias áreas de nuestras vidas, entre las que destacan la educación.
Al declararse la pandemia a nivel mundial y la jornada de sana distancia nacional, las instituciones educativas se vieron forzadas a cambiar de manera abrupta de un esquema presencial a uno virtual, además de concluir el ciclo escolar con anticipación.
El periodo de verano fue el espacio donde las instituciones de los diferentes niveles educativos diseñaron estrategias para poder iniciar el ciclo de manera virtual.
En el caso de la Educación Media Superior, incluso se hablaba de la posibilidad de regresar de manera presencial el 21 de septiembre.
Las condiciones no han sido las ideales, por lo que el inicio del ciclo escolar para los diferentes niveles educativos ha tenido que darse nuevamente en un esquema virtual.
Este lunes 21 de septiembre iniciaron su ciclo escolar las instituciones de Educación Media Superior en Sonora, lo que significa que alrededor de 133 mil jóvenes estarán iniciando sus clases.
Padres, alumnos y docentes, han enfrentado grandes retos para adaptarse a la educación en línea y la población juvenil no es la excepción.
Los estudiantes de Educación Media Superior deben desarrollar sus procesos de aprendizaje en casa en medio de la frustración del aislamiento social, en una de las etapas donde la socialización resulta ser muy importante.
A la frustración de no poder convivir en el aula, se debe sumar el hecho de que las actividades deportivas y culturales, que eran parte de la formación integral de los jóvenes, también se vieron restringidas.
El hecho de verse limitados durante este periodo de su vida, hace que sea muy complejo el manejo de sus emociones.
Los retos que deberán enfrentar los padres de familia y docentes para acompañar a los jóvenes sonorenses en su inicio de clases en Educación Media Superior incluyen: lograr que la educación a distancia pueda compensar la cercanía del aula de clases; encontrar formas para compensar la ausencia de socialización, y desarrollar estrategias que permitan a los jóvenes concentrarse en casa y hacer que en general este ciclo escolar atípico resulte provechoso para todos.
La educación es una forma de brindar estabilidad y seguridad a la juventud, ya que ayuda a implementar una rutina, a utilizar su tiempo de forma productiva y así afrontar la frustración, el estrés y el miedo que pueden estar sintiendo a causa de la pandemia.
Es muy importante que como sociedad hagamos un esfuerzo para que los jóvenes no abandonen sus estudios teniendo como pretexto la contingencia sanitaria.
La experiencia de aprender en casa para los adolescentes es sumamente retadora, sobre todo en un país donde el esquema online no se había puesto en marcha antes.
Padres de familia y docentes deben brindar la certeza de que se está avanzando en los procesos de construcción del aprendizaje y que la continuidad en la educación es fundamental no sólo para su desarrollo, sino para su salud mental.
Desde este espacio deseamos mucho éxito a las alumnas y alumnos de Educación Media Superior que esta semana retornan a sus actividades y a los padres de familia y profesores, deseamos que cuenten con la templanza y empatía necesarias para asumir los retos de la educación a distancia para la juventud.
La autora es profesora de la Escuela de Negocios del Tecnológico de Monterrey Campus Sonora Norte y Directora de la Agrupación George Papanicolaou Hermosillo.
@PaulaTakashima paulatakashimaaguilar@gmail.com