Vicente Fernández fue un gran maestro para mí: Lucía Méndez
CIUDAD DE MÉXICO.- Lucía Méndez recuerda que la última vez que vio a Vicente Fernández fue hace casi tres años, y platicaron de muchas cosas, entre ellas lo contento que estaba descansando en su rancho Los Tres Potrillos y dedicando tiempo a su familia, todo en una conversación entre amigos y saber que ya no está más la entristece.
"Viendo que los grandes ídolos se están yendo, primero Carmen hoy Vicente, pero también se fue Camilo Sesto, José José, Juan Gabriel, es muy fuerte; realmente estoy muy triste y lo único que me da gusto es que ya no está sufriendo Vicente".
Lucía Méndez recuerda muchas cosas del cantante, como su alegría, sus bromas, lo espléndido que era cuando él se sentaba a la mesa y quería que todo el mundo comiera, entre muchas otras, ya que, además de hacer películas como "El hijo del pueblo" (1974) y "Juan Armenta el repatriado" (1976), trabajó con él en Estados Unidos en el The Million Dollar Theatre en diversas etapas de su carrera.
"Él me lanzó en EU, me dio el apoyo en mi carrera como cantante cuando empecé cantando rancheras en 1976. De alguna manera para mí Vicente Fernández fue mi gran escuela y gracias a Dios me fue muy bien en ese difícil género, por el gran apoyo que tuve de Valentín Trujillo y de Vicente Fernández".
La intérprete de "Corazón de piedra" se dice afortunada, porque tuvo la oportunidad de conocer y convivir con artistas que hoy son leyendas.
"Viví con Vicente Fernández cosas maravillosas, él me lanzó en la canción y en el cine, entonces realmente me siento afortunada y al mismo tiempo muy triste de perderlos, porque también Carmen Salinas tuvo que ver como madrina mía cuando yo empezaba como modelo en Tome Nescafe, durante un año me cuidó, me aconsejó, entonces son personas que han marcado mi vida tanto profesional como de ser humano, como de amigos, pero hoy perdemos a Vicente y sí estoy triste y ni hablar, porque no hay duda de que cuando llega, llega".
Durante la época que le tocó viajar con él para sus presentaciones como cantante, Lucía recuerda que la cuidaba mucho porque era muy joven, además de que la aconsejaba sobre qué cantar y aclara: "siempre hubo una amistad, sólo una amistad punto, nunca hubo nada más".
Debido a compromisos de trabajo no podrá estar presente en el último adiós de Vicente, pero Lucía está segura que la familia Fernández, encabezada por doña "Cuquita", están haciendo lo que el charro siempre pidió.
"Que quería estar con su gente, que el día que muriera no hubiera tanta tristeza, que hubiera música, alegría, porque él quería llegar al cielo con mucha luz, siempre se lo decía a mucha gente y entre ellas a mí, entonces en este momento él debe estar contento, debe estar feliz, debe de estar con bombos y platillos en el cielo. Vicente Fernández no ha muerto, tiene su trayectoria, su leyenda, sus películas, sus canciones y lo vamos a recordar por siempre".