Ramón Ayala celebra 50 años de trayectoria

Con sus más grandes éxitos como "Mi piquito de oro", "Chaparra de mi amor", "El disgusto", "Entierrenme cantando", "Recuérdame y ven a mí", "Del otro lado del portón", "Qué tal si te compro", "No por que seas tú" deleitó a sus seguidores que asistieron al Audiorama del Trompo, en la Feria de Tijuana.

El intérprete de "Tragos amargos” es considerado uno de los exponentes más importantes del género norteño del país, pues en varias ocasiones ha compartido sus experiencias e inicios en el ámbito musical. A sus cinco años de edad tuvo su primer acordeón y su padre fue quien le enseñó a tocarlo.   

Son casi 60 años desde que el Ramón Ayala se ha dedicado a la música, dentro de un género que a pesar de ser popular, ha tenido que ganarse a pulso el reconocimiento de la crítica musical "sería", sin embargo, no hay nada más serio que la carrera del señor Ayala y su grupo, Los Bravos del Norte.

Sus álbumes, conciertos, cientos de éxitos musicales y el cariño de sus seguidores de diferentes partes del mundo, el Rey del Acordeón es de los pocos artistas que han cruzado la línea de dos mercados en el Regional Mexicano y la Música Tejana.

Ramón Covarrubias Garza, mejor conocido artísticamente como Ramón Ayala nació en el año de 1945 en Monterrey, Nuevo León  e inició en la música desde muy joven con presentaciones en las cantinas junto con su acordeón. Sus géneros musicales son regional mexicana, grupera, norteña y corridos.

Los Alegres de Terán, pioneros en la música norteña, inspiraron con su acordeón y un bajo sexto al cantante para hacer sus primeras canciones. En 1960, Ramón logró comprarse un acordeón “Gabbbanelli” de alta gama, que le permitió nuevas sonoridades en sus interpretaciones.