Claudia y la ‘Torita’

Claudia y la ‘Torita’, escribe Joaquín López-Dóriga en #EnPrivado

A las palabras se la lleva el viento, pero las regresa, siempre, el tiempo.

Florestán.

Claudia Sheinbaum es la preferida de López Obrador para sucederlo en Palacio Nacional, a pesar del enojo que tuvo cuando en las pasadas elecciones de junio perdió más de la mitad de las alcaldías de la Ciudad de México.

Por instrucciones suyas, reforzó su gobierno en lo que le había fallado, la operación política y entró como secretario general Martí Batres, y también envió una nueva encargada de los programas sociales capitalinos, que había sido integrante de su ayudantía de seguridad.

A raíz de todo esto, Sheinbaum endureció su discurso y se convirtió en el eco meridiano de lo que el Presidente declaraba por la mañana: INE, Tribunal Electoral, jueces, medios, lo que sea. Ella lo acompaña y endurece, y sin sonar igual.

El miércoles pasado estrenó vestido y se fue a Chilpancingo a la protesta de Evelyn Salgado como gobernadora de Guerrero.

Allí fue la estrella, después de Félix Salgado, claro. Incluso él la acercó con Ricardo Monreal para una reedición del abrazo, ahora falso, de Acatempan, con el respeto y distancia de aquellos personajes.

Sentada en primera fila al lado de Salgado, subió un tuit donde anunciaba, con una foto jubilosa, que había asistido a dicha toma de posesión, y agregaba: “Por cierto, (sic), no hay nada más machista que referirse a una mujer como la hija de, la esposa de, etc; como si las mujeres fuéramos pertenencia de alguien”.

Y olvidó que en la boleta electoral, al lado del nombre de Evelyn Salgado, a petición Morena para que los suyos la identificaran, anotaron: Hija de Félix Salgado, y en su campaña se presentaba ella misma y su padre, como la

“Torita”, en referencia a que su papá era el “Toro”, y ella su candidata.

Pero Claudia ya está en campaña aunque sea jornada laboral y hablando de machismo al lado de Félix Salgado.

RETALES

1.- ARITMÉTICA. El bloque opositor en la Cámara de Diputados quiso vender el peso de su alianza, cuando en realidad es cero ante iniciativas de mayoría simple, pues Morena y aliados la superan fácilmente. El reto será en la reforma eléctrica a finales de noviembre, donde veremos si la 4-T dobló a Alejandro Moreno, porque sin los votos de bancada priista, setenta, no tendrá a mayoría calificada y no pasará;

2.- GUSTO. Jaime Bonilla, gobernador saliente de Baja California es uno de los más queridos por López Obrador. Así lo hizo público en su gira por aquel estado donde anunció que vendría al gabinete. Y cuando le preguntaron a qué posición, el Presidente respondió: a la que él quiera. Nadie como Bonilla; y

3.- INDIFERENCIA. Murió por Covid-19 Rodrigo de la Riva Robles, un pilar de la Secretaría de Seguridad Pública federal y de su titular Rosa Icela Rodríguez. Era titular de la Unidad de Análisis Estratégico. Y apunto lo de la indiferencia porque ni un pésame, ni un adiós.

Nos vemos mañana, pero en privado.