La última semana
Creer hasta no ver y ver hasta no creer.
Florestán.
La que comienza el lunes, será la última semana de gobierno del presidente López Obrador.
Así de rápido ha corrido su gobierno si uno mira a aquel sábado 1 de diciembre de 2018, hoy hace cinco años, nueve meses y 20 días, cuando se terció la banda presidencial ante el Congreso de la Unión en San Lázaro y planteó los principios de su gestión que termina con el último minuto del próximo lunes 30.
El suyo ha sido, para él, un gobierno único, diferente, nacionalista y popular, la revolución de las conciencias, su cuarta transformación tras la Independencia, la Reforma, la Revolución, altura y continuidad en las que coloca su cuarta transformación.
Y Claudia Sheinbaum, quien ha hecho suyo ese compromiso que va más allá de un gobierno, recibirá un país en el que por encima del discurso oficial, enfrenta muchos retos y condiciones más difíciles de los que recibió Lopez Obrador aquel diciembre de 2018.
En lo económico, el mayor déficit de este siglo y no visto desde los años ochenta, un sistema de salud que ni de lejos es como el de Dinamarca, ya para no hablar del mejor del mundo, como repite y el peor nivel de inseguridad de que haya registro con casi 200 mil homicidios, promedio de 95 diarios y uno cada 16 minutos y más de 51 mil desaparecidos. De los 115 mil desde que se lleva el registro, en los años sesenta, casi uno de cada dos se dio en este sexenio.
Por otro lado, recibe un congreso diseñado por el presidente y 24 gobernadores también designados por él, un partido-movimiento que no se puede entender sin López Obrador como a este tampoco se puede entender sin él, en donde reinará Luisa María Alcalde, pero gobernará su hijo Andrés Manuel Lopez Beltrán que seguirá más que la línea de la nueva Presidenta, la que le comenten desde esa finca en Tabasco que tiene como nombre un destino obligado pero que se resiste a tomarlo.
Pero eso ya será decisión de la nueva Presidenta, de su antecesor y de las circunstancias.
RETALES
1.- CARGO. Pues no, no será Andy el secretario general de Morena, dijo Mario Delgado. Lo será de Organización, que es la posición partidista más poderosa. Pero tampoco importa mucho el cargo siendo Andrés Manuel Lopez Beltrán;
2.- ENTREGA. Después de aquel inusitado desplegado del CCE contra la reforma judicial, las aguas mansas y oficialistas de su dirigente, Francisco Cervantes, volvieron a su nivel y salió a la defensa de dicha reforma, no hay que alarmarse, dijo; y
3.- DATOS. López Obrador terminará su gobierno sin la información de Zambada que ha pedido a Washington y que ya luego se irá sabiendo y por eso dio por cancelada su relación con Ken Salazar, del que dijo que "no tenemos tema para reunirnos".
Nos vemos el martes, cuando falten siete días, pero en privado.