Devaluando al Águila Azteca
Creen que la línea de meta es el final, cuando en realidad, es el principio.
Florestán
El sábado, en Campeche, el presidente López Obrador entregó el Águila Azteca, la máxima condecoración que el Gobierno de México otorga a un extranjero, a quien detenta la presidencia de Cuba: Miguel Díaz-Canel.
El destinatario de este reconocimiento es elegido por el Presidente de la República, vía un consejo creado en la SRE en 1932, que él encabeza como Gran Maestre de la Orden.
La lista de quienes la han recibido es enorme y de contrastes: desde científicos, escritores, millonarios, dictadores, como es el caso del sábado en Campeche, hasta verdaderos hombres de bien.
De éstos, destacó Alma Reed, Nelson Mandela, Mario Vargas Llosa.
Pero también otros como Haile Selassie, el dictador Rafael Leónidas Trujillo, el Shá de Irán, Fidel Castro, Alberto Fujimori, Mohamed VI de Marruecos, Cristina Fernández de Kirchner, Álvaro Colom, de Guatemala, el yerno de su "amigo Trun", Jared Kushner y otros burocráticos por haber formado parte de alguna comitiva oficial, como un paje de la Reina de Dinamarca y una larga lista de embajadores y hasta un cónsul honorario de México en Murcia, sólo por citar algunos.
Pero el que se la llevó el sábado fue Miguel Díaz-Canel por su relación fraterna, reiteraron ambos y por los servicios, vendidos, que no prestados, de los especialistas cubanos, a los que el Gobierno de México paga al de Cuba, no a ellos y la venta, que no donación, de la vacuna Abdalá, que no se aplica porque no tiene la aprobación de la OMS, ni siquiera de la cuatroteísta Cofepris, al mando de ese científico que se llama Hugo López-Gatell.
Y el que el Águila Azteca se haya entregado en el pasado a dictadores no justifica que hoy hagan lo mismo, los que dicen ser diferentes.
Y que quede claro, el reconocimiento no es del pueblo de México, es del Presidente en turno.
RETALES
1.- TIEMPO. Como le había dicho, el Presidente juega con los tiempos a favor en su reforma electoral. El plazo para presentar recursos en su contra vence el 30 de abril. Igual ese día, último de este periodo ordinario, la aprueban en el Senado, él la publica por la noche y no quedará tiempo para impugnación alguna, por lo que quedaría firme;
2.- ESTRATEGIA. El juicio en Nueva York contra Genaro García Luna está por decidirse esta semana, mucho antes de lo anunciado. Él no subirá al estrado. Irán a las deposiciones finales de defensa y fiscalía. De ahí, todo quedará en la decisión del jurado que, en cualquier sentido, tiene que ser por unanimidad de sus doce integrantes; y
3.- CANTADA. Acreedores de Aeromar embargaron tres de los últimos cinco aviones con los que operaba y sólo le quedan dos. Su final es inminente. Será, con Interjet, la segunda aerolínea que desaparezca en tiempos de la 4-T, pero todos por malos manejos empresariales.
Nos vemos mañana, pero en privado.