El insulto como discurso presidencial

"El insulto como discurso presidencial", escribe Joaquín López-Dóriga en #EnPrivado

Hay que pelear por las causas perdidas. Las otras se ganan solas.

Florestán

Desde hace tiempo tenía claro, y aquí lo he señalado, que con el correr de la última parte de su gobierno, que ya inició, Andrés Manuel López Obrador radicalizaría su discurso.

Pero siempre pensé que sería a partir de las ideas y los argumentos, incluso de las consignas que repite, pero no por la vía de los insultos a la que se ha subido en un afán de ofender y agraviar, lo que refleja que las citadas ideas y argumentos no son lo suyo, lo fácil y ya cotidiano es el insulto reiterativo con arrebato y enojo.

Así se ha mostrado desde el lunes al referirse a los organizadores y participantes en la marcha del domingo contra su reforma política que abarca la intervención en los organismos autónomos, INE y Tribunal, ante los que en lugar de debatir, insultó. Los ha llamado rateros, clasistas, hipócritas, achichincles, despistados, racistas, aspiracioncitas, fifís, retahíla con afán de agraviar, a la que ayer  agregó cretinos, corruptazos, vulgares, ambiciosos, descalificaciones que repite con frecuencia con el fin de insultar como método: mentirosos, farsantes, corruptos, matraqueros, inmorales, alcahuetes, saqueadores, esto independientemente de las 20 veces que a unos y otros ha mandado al carajo, agotada su lista.

Sobre esto, el doctor José Antonio Lozano Díez me decía ayer que la pérdida del lenguaje, su pobreza, reduce la capacidad de reflexión y de pensamiento, debilita el diálogo y, por ende, los sistemas democráticos, afecta la libertad, promueve la decadencia social y su vulgarización.

Y es que cuando faltan palabras, decae la capacidad de pensamiento.

En eso estamos con este nivel de discurso presidencial.

RETALES

1.- OXÍGENO. En su Presupuesto de Egresos de 2023 el Presidente recortó seis mil 642 millones de pesos a organismos autónomos, de los que cuatro mil 475 se los quitó al INE. A este paso no hará falta reforma electoral, el estrangulamiento financiero será la herramienta. El riesgo es cómo llega el instituto al proceso electoral de 2024 que inicia el próximo septiembre. A la CNDH no la tocó. No es autónoma;

2.- RECORTES. El Presidente anunció que ante la baja del Covid, los reportes de salud en la mañanera serán cada quince días. Pero también los de seguridad, donde no hay baja estructural. Al día de ayer los homicidios dolosos en lo que va de este gobierno sumaban 138 mil 594, uno cada 16 minutos desde el 1 de diciembre de 2018. En 2020 era uno cada quince minutos. Esa es la mejoría; y

3.- ZÓCALO. López Obrador retó a los marchistas del domingo a llegar al Zócalo, en lo que coincido, y no quedarse en el Hemiciclo a Juárez. Pero resulta que el escenario de sus mayores éxitos está ocupado con cinco diamantes y dos estadios por la Copa Mundial de Beisbol. ¿Cómo llegar sin afectar el deporte oficial de la 4-T?

Nos vemos mañana, pero en privado.