Radicalización al alza

"Radicalización al alza", escribe Joaquín López-Dóriga en #EnPrivado

El que el otro sea débil no te hace fuerte.

Florestán

Ayer le hablaba sobre el endurecimiento del discurso de López Obrador que ha convertido el insulto al opositor en una herramienta cotidiana, devaluando el diálogo político y lo que tanto dice cuidar: la investidura presidencial.

Y le decía, citando al doctor José Antonio Lozano Díez, que la pérdida del lenguaje, su pobreza, reduce la capacidad de reflexión y de pensamiento, debilita el diálogo y, por ende, los sistemas democráticos, afecta la libertad, promueve la decadencia social y su vulgarización.

Por eso, ante la pobreza innegable de lenguaje, ha reducido su capacidad de reflexión y pensamiento, debilitado el diálogo y, por ende, los sistemas democráticos, afectando la libertad, lo que reviste como revolución de las conciencias.

Estamos en ese proceso como lo confirma cada mañana desde el Salón Tesorería de su palacio.

Hoy, convertido en el principal promotor de la marcha del domingo contra su reforma política, ha recurrido al insulto y no a las ideas, a la injuria y no a los argumentos lo que, sin duda, enardece a su feligresía, pero olvidando que México somos muchos más que sólo los suyos, somos todos.

Esta conducta forma parte del proceso inevitable del fin de gobierno que se acerca inexorablemente y aun siendo López Obrador un presidente diferente a sus antecesores en cuanto al ejercicio de ese cargo y del poder, esa fase terminal, origen de todas las crisis, es inevitable.

Al día de hoy, le faltan un año, diez meses y veinte días de presidencia, lapso en el que se irá endureciendo y radicalizando más, fase que ya inició.

RETALES

1.- AJUSTE. El Banco de México está por perder una de sus mejores y más sólidas cartas, a Gerardo Esquivel. El Presidente lo va a proponer como su candidato a la presidencia del Banco Interamericano de Desarrollo, toda vez que retiró la de Alicia Bárcena. Esquivel haría un extraordinario papel al frente del BID. El punto es que ese cargo lo aprueba el Presidente de Estados Unidos. Espero que López Obrador ya lo haya planchado con Joe Biden. Si no, ¿para qué exponerlo?;

2.- ULTIMÁTUM. Ricardo Monreal denunció que en Morena se ha acrecentado la guerra en su contra diseñada por asesores extranjeros y escribió: "Claudia frena tu jauría, no más división". Y dejó ver que en diciembre se bajaría de Morena, lo que no veo, pues de eso dependen sus posiciones de gobierno en el Senado: presidencia de la Jucopo y la coordinación de su bancada; y

3.- NACIMIENTOS. Le he contado que el país arde y la Corte marcha ajena, cuando se monta en un caso que busca prohibir nacimientos en espacios oficiales porque afecta la libertad religiosa. En este sentido viene el proyecto de Juan Luis González Alcántara Carrancá. Lo que sigue es prohibir las ofrendas de muertos. Con eso distraen del fondo de los pendientes.

Nos vemos mañana, pero en privado.