Mucho por perder, poco por ganar
Se les va la vida sin haberla vivido.
Florestán.
He insistido en qué se la ha perdido al presidente López Obrador en Washington de cara a su visita a Donad Trump, el presidente que más daño ha hecho a nuestros paisanos en Estados Unidos y que más ha ofendido a nuestro país.
Yo recuerdo los mensajes de López Obrador como precandidato, trazando su raya con Trump y demoliendo a Enrique Peña Nieto por su apuesta por él como próximo presidente de Estados Unidos y que al final las urnas le dieron razón sin que eso se tradujera en un beneficio, entonces, para su gobierno ni para nuestro país.
Trump nunca se lo reconoció.
Al triunfo de López Obrador en julio de 2018, se marcó dos prioridades elementales: no tener un conflicto con Trump y evitar una crisis económica que afectara su proyecto de Nación.
Para evitar la ruptura con Trump, cedió a todas sus presiones y, para no caer en la crisis económica, se le acabaron los argumentos.
En 2019 el país tuvo un crecimiento negativo que lo agarró descolocado para el tsunami financiero derivado de la pandemia del Covid-19 que de acuerdo con la más reciente proyección del Fondo Monetario Internacional nos llevará a una caída libre de 10.5% en el crecimiento de este año.
En estas circunstancias, López Obrador decidió visitar a Trump en los próximos quince días, sabedor que es mucho lo que tiene que perder, pero también lo que afectaría el que rechazara el encuentro que, por cierto, Enrique Peña Nieto le canceló en dos ocasiones.
Yo he reiterado una y otra ve que no sé qué se la ha perdido a López Obrador en Washington, pero estoy empezando a ver que podría perder mucho más si le cancelara la visita, independientemente del riesgo de visitar a ese energúmeno en plena campaña electoral que hoy no tiene cómo ganar.
Lo veremos tan pronto como el primer martes de noviembre.
Y entonces haremos cuentas.
RETALES
1. CERO.- El director de la cancillería para América del Norte, Roberto Velasco, me dijo ayer que no está previsto un encuentro con el candidato demócrata Joe Biden, porque sería darle un carácter electoral al viaje de López Obrador.
Si gana Biden, será difícil la reconstrucción;
2. CONTAGIO.- El secretario de Hacienda Arturo Herrera, en su enlace del viernes donde estornudaba y tosía, aclaró que era una alergia, no Covid.
El lunes estuvo al lado del Presidente y de la Secretaria de Gobernación, ya infectado y sin guardar la sana distancia.
Ayer anunció que había dado positivo y ahora sí será necesaria la prueba al Presidente y a sus acompañantes; y
3. APLANANDO.- Siguen con el discurso de haber domado la pandemia y aplanado la curva cuando ayer fue el segundo día con más contagiados de Covid-19, seis mil 104 para llegar a 202 mil 951 casos y el quinto día con mayor número de muertes, 736, para tocar los 25 mil 529.
La realidad rebasa los discursos.
Y lo que falta.
Nos vemos el martes, pero en privado.