¿Qué pretende el Presidente?
¿Cómo interpretar las últimas acciones del Presidente? Las 20 iniciativas de reforma constitucional que envió el presidente López Obrador al Congreso de la Unión para su análisis es un acto que carece de lógica desde la perspectiva legislativa.
Los tiempos que quedan disponibles son muy cortos para analizar temas complejos y de tan alta relevancia política como éstos.
El Presidente sabe que Morena no cuenta hoy con los votos para aprobar estas iniciativas.
Sin embargo, sigue empujando mediáticamente el tema y surge la pregunta: ¿Qué pretende conseguir el Presidente?
Su objetivo no es lograr su aprobación en el Congreso, sino meter estos temas en la conversación pública para que estas iniciativas terminen siendo interpretadas como propuestas de campaña que debe abanderar su candidata personal. Le apuesta a que la ciudadanía le dé su voto a su candidata para que haga realidad ese proyecto de nación.
Entre más se difundan y generen controversia estas discusiones, más se promoverán y serán valoradas públicamente.
Entre estas veinte iniciativas hay varias muy oportunas y benéficas, como la que pretende asegurar el acceso a la salud gratuita para todos los mexicanos, y la que se refiere a garantizar vivienda para todos, así como la que ofrece becas a familias pobres en todos los niveles educativos y la que prohíbe el maltrato animal, entre otras.
La bondad de algunas de estas iniciativas ha entusiasmado con buena fe a los legisladores de la oposición que se han sumado a la invitación de la bancada de Morena para analizarlas. Sin embargo, no es el contenido de estas iniciativas de ley lo cuestionable, sino la oportunidad del momento seleccionado por el Presidente para darlas a conocer.
El Presidente sabe que a través de este tipo de estrategias atraerá la atención ciudadana y con ello el voto para su partido en la próxima elección.
Aunque el Presidente no estará en la boleta electoral el 2 de junio, él sabe que virtualmente sí estará presente.
La justificación es planteada públicamente como un paquete de iniciativas dirigidas al Congreso, pero en realidad él las convertirá en propuestas de campaña.
¿AHORA SÍ?
Los Ardillos han operado con total impunidad en Guerrero cobrando derecho de piso y asesinando a ciudadanos inocentes.
Mientras esto sucedía ni la FGR, ni el inquilino del palacio se preocuparon de cumplir su responsabilidad constitucional.
Sin embargo, cuando este líder criminal dio un testimonio a Loret de Mola de cómo fue testigo de la entrega de recursos para la campaña del hoy Presidente de la República, entonces encontrarlo se convirtió en un objetivo prioritario, para que aporte pruebas que confirmen sus dichos.
Quizá pronto sepamos que lo ubicaron y veamos un video donde éste se retracta y acusa que fue engañado por el periodista que lo entrevistó.
Cuando la alcaldesa de Chilpancingo, Norma Otilia Hernández, se reunió con este capo para platicar en una charla de amigos, ni se inmutó el Presidente.
Ahora que este líder de un cártel cometió la ofensa de evidenciar la entrega de recursos a la campaña presidencial de 2006, entonces se volvió objetivo prioritario. Es la doble moral y la ausencia de valores de nuestros gobernantes. ¿A usted qué le parece?
Ricardo Homs
@homsricardo