Una nueva historia de plagio
El nuevo escándalo de plagio no tiene precedentes, -pues de comprobarse- pone en entredicho la autoridad moral de la ministra de la SCJN, Yasmín Esquivel Mossa, para cumplir con sus atribuciones y responsabilidades como garante de la constitucionalidad en nuestro país.
La noticia detonada por el intelectual y académico Guillermo Sheridan puso al descubierto un muy probable caso de plagio de la tesis de Licenciatura de la ministra de la SCJN, con la que ella se tituló como abogada en 1987, texto que parece ser copia fiel de la tesis presentada un año antes por Edgar Ulises Báez Gutiérrez en la Facultad de Derecho de la UNAM.
Debe ser la UNAM quien ofrezca el veredicto definitivo, aunque los documentos exhibidos públicamente -tanto el de la ministra como el del abogado Báez- parecen ser idénticos.
Este caso en particular tiene varios aspectos relevantes que considerar. Primeramente, que la ministra es una de las candidatas para suceder en la Presidencia de la SCJN al ministro Zaldívar, con altas posibilidades de lograrlo con base en el apoyo que ella tiene del presidente Andrés Manuel López Obrador.
Esto a su vez, terminó siendo aderezado por López Obrador en su mañanera del viernes 23 de diciembre. No desaprovechó la oportunidad de desviar la atención de este caso, hacia Enrique Krauze y Guillermo Sheridan, culpándolos del saqueo de las arcas nacionales.
Este escándalo mediático nos refiere una vez más a este rasgo muy propio de nuestra idiosincrasia nacional, que minimiza el plagio de obras intelectuales -igual que el manoseo de los derechos de artistas y creadores- e incluso, de obras del ámbito industrial. Este es un país donde la piratería es tolerada pues no se considera delito apropiarse de un intangible.
Mientras en todo el mundo se valora con respeto el trabajo intelectual, en nuestro país se minimizan los derechos de propiedad y se considera un bien de dominio colectivo, que puede ser manoseado por todos.
De este modo vemos cómo florece la piratería de libros, de películas, así como de música, sin que la autoridad correspondiente intente realizar acciones contundentes para proteger los derechos de los creadores.
¿Qué sucederá en este caso específico que afecta desde muchos ámbitos los intereses de la 4T?
Su impacto es algo impredecible, pues para las autoridades gubernamentales pareciera tratarse de una falta menor, de tipo académico o incluso escolar, equivalente a copiar al vecino durante un examen.
Sin embargo -desde un punto de vista ético-, impacta la credibilidad de quien tiene la facultad de dictaminar los conflictos más importantes de este país, desde la visión jurídica de la constitucionalidad. Sin embargo, la duda que queda en el aire es: si el plagio se consuma a partir del dictamen de las autoridades académicas… ¿hasta dónde sería capaz de meter las manos por ella, el presidente López Obrador?
Independientemente del aprecio y simpatía que nuestro Presidente pueda sentir por ella, está el antecedente de la amistad que desde hace muchos años le une con el esposo de la ministra, el empresario de la construcción, el ingeniero José María Riobóo. ¿A usted qué le parece?
RICARDO HOMS
Twitter: @homsricardo
Presidente de la Academia Mexicana de la Comunicación