Apple: la manzana de Turing

"Apple: la manzana de Turing", escribe Ulrich Richter en #ColaboraciónEspecial

Otra historia donde un garaje es el inicio de un gran emporio es Apple. En efecto, en la cochera de Gordon French se llevó a cabo el encuentro de Homebrew-Computer Club, en el que se encontraba el pitagórico Steve Wozniak, quien trabajó en Hewlett-Packard en Cupertino. 

Como los otros líderes tecnológicos, tuvo al mejor maestro en casa, como Aristóteles con Alejandro Magno. Fue su padre quien les explicaba a los jóvenes Wozniak y Jobs cómo funcionaban los protones y los electrones. La empresa que fundaron Steve Jobs, Stephen Wozniak y Ronald Wayne en 1976 es una de las más exorbitantes del mundo. Para agosto de 2020, alcanzó un valor de más de dos billones de dólares, siendo la primera compañía en Estados Unidos en alcanzar este máximo histórico. 

El desarrollo de las computadoras de escritorio fue una de las principales acciones que encaminaron a la popularización de la computación. Sus orígenes se remontan a los aficionados que construían computadoras caseras con combinaciones de diversos chips. A finales de la década de 1960 todas las bases de la información personal ya estaban casi sentadas, pero gracias a la empresa de hardware DEC surgieron ejemplos de cómo era posible reducir gigantescas computadoras a microprocesadores de fácil acceso. En Stanford ya habían creado el mouse, el Departamento de Defensa de Estados Unidos había conectado la primera Internet, y muchos desarrolladores ya visualizaban que las máquinas pudieran desempeñar funciones más individuales para la gente común. De este modo, en 1976, Steve Jobs y Stephen Wozniak fundaron Apple Computer Inc. y lanzaron una computadora doméstica comercialmente viable. 

Décadas después, en 2007, llegaría el iPhone que volvió a revolucionar las máquinas de la era digital. Éste copió las funciones de una computadora, y con sus aplicaciones, agregó algunas capacidades. Por su parte, Google salió al mercado con su software Android para los teléfonos que lo acompañaban. Los llamados smartphones transformaron la unificación simultánea del hardware, software y servicios. Así que dicho auge llevó a Apple a caminar por el sendero de las empresas de Estados Unidos que subían su valor, posicionando sus dispositivos por todas partes del mundo. 

Las nuevas escuelas matemáticas han cambiado el mundo, posiblemente puedes o no estar de acuerdo conmigo, pero el propio Tim Cook, CEO de Apple, en una entrevista exclusiva para la revista Fortune, respondió del siguiente modo a la pregunta ¿Apple ha cambiado al mundo?: “Sí, creo que de muchas maneras. La forma número uno en que Apple cambia el mundo es a través de nuestros productos”. 

No podríamos abordar este apartado sin tomar en cuenta nuevamente a Alan Turing (1912-1954), quien es considerado uno de los iniciadores o padrinos de la inteligencia artificial y marca el pasado y el porvenir de esta disciplina. “Aportó grandes avances en cuatro áreas de aquella informática primitiva: la teoría de la computación, la arquitectura de computadores, el criptoanálisis y, por supuesto, la inteligencia artificial”. 

En 1950, Turing propuso una prueba basada en una idea muy simple: se podría decir que una máquina “pensaba” si un juez, al interactuar con ella, no pudiera descifrar si era una computadora o un ser humano. La interrogante sería si la máquina puede pensar. 

Termino con un dato curioso sobre este coloso, para agregar una más a la serie de leyendas que describo en mi último libro: “Los filósofos en la era tecnológica. Los pitagóricos de hoy”, algunas muy antiguas y otras no tanto: se dice que Apple tiene el logo de la manzana mordida en honor a Alan Turing, que se suicidó, al parecer, precisamente con una manzana envenenada. Otra versión asegura que es por el fruto del jardín del paraíso. 

Así que no sólo Turing, Adán y Eva están relacionados con la manzana, sino todos aquellos que la mordemos cuando usamos las innovaciones tecnológicas del citado coloso. 

ULRICH RICHTER

Twitter: @UlrichRichterM

Abogado y activista, maestro en Ciencias Penales