El retiro de EU de Afganistán, ¿un nuevo Vietnam?
La imagen de ayer, de un avión del Ejército de los Estados Unidos que despega del aeropuerto de Kabul, llevando a bordo a todo el personal de su Embajada en Afganistán, mientras decenas de afganos intentan huir de su país por la llegada del régimen de los talibanes, quedará para la posteridad. Será la imagen que marque el fin de una incursión fallida de la superpotencia militar, que termina tras 20 años de ocupación y deja atrás una estela de enormes costos económicos y políticos para Washington, por la muerte, en esa guerra, de 2,500 soldados estadounidenses, más de 20 mil heridos y un país centroasiático que, abandonado por la milicia de las barras y las estrellas, se sumirá en el caos.
La estampa dolorosa que anticipa lo que viene en Afganistán con el regreso del régimen extremista talibán que ya empezó a prohibir los derechos y libertades, sobre todo de las mujeres, quedó registrada ayer en un video que le dio la vuelta al mundo y que muestra el momento en el que ese avión militar de la Fuerza Aérea de EU es seguido en su despegue por decenas de afganos desesperados que se aferran a salir de su país a cualquier costo y algunos se trepan en las partes exteriores de la aeronave militar aferrándose de lo que pueden con tal de abandonar su territorio.
Una vez que el enorme avión tipo Boeing C-17ª Globemaster logra despegar, desde el aire se observa cómo caen al vacío los pocos afganos que lograron aferrarse a la aeronave después de su despegue.
Ayer el presidente Joe Biden, quien finalmente tomó una decisión que habían evitado y pospuesto sus antecesores y que él mismo le recomendó al presidente Barack Obama, cuando fungió como vicepresidente durante su administración, salió a defender su estrategia del retiro definitivo de las tropas estadounidenses con el argumento de que no repetiría los “errores del pasado” y que esa guerra solo había causado sufrimiento y dolor a los estadounidenses.
Biden cumple así una promesa que hizo desde su campaña y toma una decisión que tendrá muy altos costos políticos, ante la percepción mundial de que Estados Unidos se retira fracasado después de haber invadido Afganistán en 2001, tras los ataques terroristas del 11 de septiembre.
Analistas y expertos empezaban a hablar del nuevo “fracaso militar” de la superpotencia que tras 20 años de costos financieros y, sobre todo humanos, no logró evitar que al final el país centroasiático terminara bajo el régimen extremista islámico.
Un general del Ejército mexicano me comentaba ayer que “estamos ante el nuevo Vietnam” y comparaba este retiro nada honroso de las tropas estadounidenses de Afganistán, con lo sucedido en 1973 en Vietnam del Sur, cuando el Ejército y la Marina de los Estados Unidos tuvieron que abandonar el territorio vietnamita, tras 10 años de una guerra inútil y fallida que nunca pudieron ganar al Vietcong y en la que murieron 57 mil jóvenes soldados estadounidenses, 500 mil civiles de aquel país y 200 mil soldados vietnamitas, dejando a Hanoi y al resto del territorio del sur sumido en el caos y la devastación.
Sin duda hay paralelismos y lecciones que se pueden extrapolar de aquel momento que marcó el triunfo del movimiento pacifista en Estados Unidos que se oponía a una guerra que, igual que la de Afganistán, resultó totalmente fallida y enormemente costosa para la superpotencia. Habrá que ver cómo el retiro ordenado por Biden hoy impacta la geopolítica actual y la cada vez más fuerte carrera entre China y los Estados Unidos por la supremacía mundial.