Si bien no hay un manual para ser Presidente...
SI BIEN no hay un manual para ser Presidente, existe consenso en que, en tiempos aciagos, se requiere un líder que infunda empatía y tranquilidad, que marque el rumbo o, al menos, que dé esperanza.
¿Andrés Manuel López Obrador supo ser ese líder?
EL MORENISTA no podrá borrar de su biografía que en los días en que México enfrentó el peor momento de la crisis del Covid-19, el Presidente decidió irse de gira.
Desde su periplo por el sureste, encomió a los mexicanos a no salir de su casa.
Y en los días en que más muertos se registraron, fue a darle el banderazo a una locomotora destartalada y maltrecha.
MIENTRAS otros mandatarios acudieron a supervisar personalmente el funcionamiento de los hospitales, el mexicano culpó a sus antecesores.
Para López Obrador lo que importa es que el número de muertos no es tan grande en porcentaje de la población, sin entender que esos muertos eran mexicanas y mexicanos con familias y con historias.
SERÁ DIFÍCIL olvidar que cuando miles de personas sufrían miedo por una enfermedad extraña, el Presidente sugería medir la felicidad.
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COMO SI estuviera paseando por las inundadas calles de Ciudad del Carmen, así le llovió a Dolores Padierna en las redes sociales.
Y es que la senadora tuiteó, a manera de amenaza, que debería investigarse por corrupción a los tres ex secretarios de Salud que se han atrevido a criticar la gestión gubernamental de la pandemia.
Y MIENTRAS Julio Frenk, Salomón Chertorivski y José Narro tienen calidad y autoridad para sostener sus dichos, a Padierna, pueees... le dijeron que si quería investigar actos de corrupción podría empezar, literalmente, por su propia casa.
¿O a poco ya no se acuerda de un tal René Bejarano?
Es pregunta.
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VAYA SHOW armó Morena contra Enrique Alfaro, colgándose de la muerte de Giovanni López, presuntamente fallecido por golpes de policías por el simple hecho de no llevar cubrebocas.
SI BIEN el crimen resulta indignante y se tiene que investigar, el uso político de los morenistas ensucia la protesta social.
El partido hizo pinza en la calle y en las redes sociales con cientos de acarreados (algunos bastante violentos); y con bots inflando los mensajes de los voceros de la 4T de una manera muy descarada.
EL ATAQUE de Morena deriva de los desencuentros de Alfaro con el gobierno federal en el tema del coronavirus, pues los jaliscienses sí lograron aplanar la famosa curva, cosa de la que no pueden presumir en Palacio Nacional.
Será interesante ver si en el futuro, las huestes morenistas manifiestan esa profunda indignación contra los abusos policiales... que pudieran cometer las fuerzas federales.