Acumulación de residuos en domicilios, un problema común en Hermosillo
HERMOSILLO, SON.- Cada mes, en la capital sonorense se reciben alrededor de 30 denuncias sobre acumuladores que guardan en domicilios todo tipo de residuos, ya sea con el fin de beneficiarse con la venta de esos materiales, o bien, porque padecen de algún tipo de trastorno psicológico, popularmente conocido como “síndrome de Diógenes”.
Norberto Barraza Alamazán, titular de Servicios Públicos Municipales de Hermosillo, apuntó que la mayoría de los casos que atienden son aquellos donde los particulares acumulan cantidades inconmensurables de basura para vender los residuos a las recicladoras.
“Nosotros hemos detectado que muchas veces ha sido por la falta de empleo o por la situación de que no tienen carro, no tienen nada, y empiezan ellos a juntar basura en carritos de supermercado. Luego han proliferado mucho las recicladoras, que compran ese tipo de materiales, donde predomina el fierro o el aluminio”, comentó el funcionario.
Asimismo, dijo que durante la contingencia sanitaria se dio un incremento en este tipo de actividad, dado que al tratarse de una población vulnerable, la falta de empleo los ha orillado a vender material reciclable, donde pueden llegar a ganar hasta 100 pesos al día para sus necesidades básicas.
“El problema que surge aquí, es que hay mucho material que recogen que no se los compran y los dejan donde viven, que mucha de esta gente utiliza casas abandonadas para realizar esta actividad. También se da el tema que limpian patios o jardines, ofrecen servicio completo de limpiar todo, pero se llevan todo a la casa abandonada más cercana”, señaló.
Barraza Almazán detalló que las colonias donde se ha registrado este problema con mayor fuerza son Villa Verde, Tierra Nueva, Solidaridad, Pueblitos, Unión de Ladrilleros, San Bosco, Insurgentes, Luis Encinas, Sahuaro, Palo Verde, Las Minitas y Altares.
Agregó que fierro, aluminio, cartón y plástico son los materiales más recolectados entre esta población, que generan malestar entre la comunidad, pues los vecinos se ven afectados principalmente en aspectos de la salud con la fauna nociva que brota en los patios con grandes acumulaciones de basura.