Utilizan el crédito para ‘salvar’ alzas
CIUDAD DE MÉXICO.- En medio de un alto nivel de inflación, los mexicanos están recurriendo al uso de la tarjeta de crédito para cubrir sus gastos diarios ante la falta de liquidez.
La cifra actual de inflación no se había visto en más de 20 años, por lo que el precio de diversos productos y servicios se ha encarecido, lo que impacta en la capacidad de pago de la población.
Tan sólo en mayo de este año, el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) se ubicó en una tasa de 7.65% anual. De acuerdo con la plataforma de asesoría financiera Rocket, una de las alternativas más recurrentes de los mexicanos ha sido el uso de tarjetas de crédito para cubrir su gasto corriente, como comprar despensa y el pago de transporte, comunicaciones, educación y esparcimiento.
Datos de la plataforma indican que la deuda promedio de los mexicanos en abril de 2022 fue de 38 mil 438.39 pesos, cuando en el mismo mes del año pasado fue de 24 mil 761.62 pesos, esto es
un aumento de 55% en la deuda.
Una constante“El uso de la tarjeta de crédito se está convirtiendo en una constante, pero este uso puede ser perjudicial. Ante el contexto inflacionario, las finanzas personales pueden salirse de control.
“Las tarjetas de crédito se han convertido en una alternativa para que las familias cubran algunas de sus necesidades básicas al no contar con liquidez inmediata para los gastos del día a día”, dijo Daniel Rojas, CEO de la plataforma de asesoría financiera Rocket.
Para Rojas, lo recomendable es que la línea de crédito se destine a compras específicas, y no para gastos como la despensa, a menos de que se trate de una emergencia, ya que esto puede afectar
la calificación crediticia de los usuarios.
“El usuario sólo debería hacer uso de 30% de su línea de crédito, ya que un monto superior podría ser un indicativo para los bancos de que podría estar endeudado”, indicó.
De acuerdo con la Alianza Nacional de Pequeños Comerciantes (Anpec), 6 de cada 10 mexicanos no tienen los recursos suficientes para poder comprar los alimentos que demandan sus hogares.