Con botas para todos los miembros de la familia; Lupe tiene una hermosa y original tradición familiar

En la sala de la casa de la familia Bay Rogel hay una colección de 96 botas personalizadas para cada uno de sus integrantes.

HERMOSILLO, SON.- La esperanza y felicidad que las botas navideñas representan toman su verdadero significado en la sala de la casa de la familia Bay Rogel, donde la ahora colección incluye 96 botas personalizadas para cada uno de sus integrantes.

La impresionante colección que tiene Lupe Lorenia en su casa inició en 1954, un año después de que naciera su hermano mayor, cuando sus padres (ya finados) mandaron hacer dos botas para los dos primeros hijos de su matrimonio.

Lupe Lorenia explicó que sus padres mandaron hacer una bota para cada uno de sus seis hijos (3 hombres y 3 mujeres) y como tradición familiar al casarse mandaron hacer botas navideñas a las y los nuevos integrantes de la familia.

Con el paso del tiempo y con la llegada de los primero nietos, los abuelos por fin mandaron hacer sus propias botas, cuando la colección abarcaba casi la mitad de la pared.

Explicó que una vez que fallecieron sus padres, ella decidió continuar con la tradición y empezó con los hijos de sus sobrinos, es decir los bisnietos de sus padres.

Desde ese entonces empezó a hacer a cada nuevo integrante una bota personalizada, con un diseño único, pero con el mismo tema, la navidad y con un significado especial para cada integrante de la familia.

Cada una de las botas tiene características muy personales, están personalizadas, con el nombre del dueño de la bota, pero tiene figuras de santa Claus haciendo diferentes actividades relacionadas con la navidad; envolviendo regalos, vestido de vaquero, poniendo el arbolito, además diseños de monos de nieve, árboles navideños, renos, monos de peluche entre otros.

“El único requisito es que se casen, en cuanto se casan le mando hacer su bota”, explicó Lupe.

Agregó que hasta el momento no han tenido problema con alguna bota que se haya tenido que cambiar o no colgar, porque todas las botas son de u integrante de la familia, se sobrino, nieto y sus cónyuges e hijos.

Al entrar a la casa sin duda lo que más llama la atención es la inmensa y detallada colección de botas, las cuales están acomodadas respetando la línea de nacimiento en orden cronológico de la familia.

Lupe Lorenia reveló que ya son varios años que amigas y familiares le dicen y la invitan a dar a conocer esta colección de botas pero dijo que aunque ella misma tomaba las fotos, fue hasta este año cuando se animó a darlas a conocer públicamente.