Lo que se sabe de las víctimas del trágico incendio en La Cholla

Tras el siniestro ocurrido la madrugada de este jueves, residentes de La Cholla todavía no pueden creer que Mayra y Alberto murieron y los recuerdan con cariño y nostalgia.
Foto: José Vallejo

HERMOSILLO, SON.- Impactados y muy conmocionados quedaron los vecinos de Mayra y su hijo Alberto, tras enterarse de la manera tan trágica en la que perdieron la vida al incendiarse su vivienda.

Tras el siniestro ocurrido la madrugada de este jueves, residentes de La Cholla todavía no pueden creer que Mayra y Alberto murieron y los recuerdan con cariño y nostalgia.

Adolfina Magaña, vecina de esta colonia, platicó cómo vivieron ella y su familia esta triste experiencia que acabó en el fallecimiento de Mayra y su hijo Jorge Alberto, dejando un sabor amargo a los habitantes de La Cholla.

A las 4:00 de la madrugada empezó el suspenso. Los vecinos de la colonia escucharon gritos de auxilio y olor a quemado, horas después, siguen sin digerir del todo los acontecimientos.

Le avisaron a mi esposo que se estaba quemando la casa de atrás y nos asustamos mucho. Empezamos a tocar la puerta de la vecina, pero nadie abrió”, comentó Adolfina.

Foto: David Araiza

La señora comentó que lo primero que hizo fue llamar al 911, después colocaron una escalera en la casa que se incendió para que los bomberos pudieran actuar de manera rápida y acelerar el proceso.

Los policías y los bomberos hicieron lo que pudieron, pero no pudieron salvarles la vida. Los vecinos estábamos viendo todo, nos dimos cuenta de cómo sacaron los dos cuerpos y presenciamos cómo un policía intentó darle primeros auxilios a uno de ellos”, agregó.

Adolfina Magaña. Foto: David Araiza

Adolfina tenía una buena relación con Mayra. Reconoce que era una muy buena vecina y una muy buena persona. También mencionó que Mayra y su hijo eran personas muy tranquilas y que cuando llegaban de trabajar simplemente se encerraban en su hogar a descansar. Adolfina recordará siempre con cariño cada ocasión en la que miraba a Mayra y se decían: “Vecina, ¿cómo está?” de la manera más alegre y cálida.

Nosotros siempre intentamos cuidarnos como vecinos. Si hubiera estado en mis manos hubiera tirado puerta y ventana. Me siento impotente con toda esta situación y ahora estaremos tomando más precauciones en nuestras casas para que no vuelva a ocurrir una situación similar”, finalizó.