Rebeca dedica su vida al cuidado de los animales en el Centro Ecológico
Rebeca Araujo Tye, una joven de 25 años, hermosillense y amante de la naturaleza desde su infancia, ha logrado cumplir su sueño de trabajar como jefa de servicios veterinarios en el Centro Ecológico del Estado de Sonora.
Se graduó hace año y medio de la Universidad de Sonora, siendo parte de la segunda generación de la carrera de Medicina Veterinaria Zootécnica.
“Desde muy pequeña hacía dibujitos según yo de cómo iba a ser mi propio zoológico y se los daba a mi mamá, la obligaba a llevarme al zoológico una vez al mes, íbamos al zoológico de Zacango en Puebla y ahí fue donde tuve la experiencia de siempre estar interactuando con animales."
Araujo siempre tuvo claro que quería ser veterinaria y enfocarse en el cuidado de animales no convencionales, como aves, hurones, serpientes y erizos, pero fue a mediados de la carrera cuando comenzó a visualizarse trabajando en un ambiente de zoológico, y cuando surgió la oportunidad, no la dejó escapar.
Su labor diaria implica realizar un recorrido completo por todas las áreas del parque para verificar el estado de salud de los animales.
"Llegué en la temporada de maternidad entonces hubo varias noticias en el centro ecológico de cómo tuvimos casos de éxito de muchas crías, es muy bonito presenciar y ser parte de ese apoyo para que fuera posible y se pudieran desarrollar esas crías", dijo con una sonrisa.
Araujo explicó que el Centro Ecológico no solo funciona como un zoológico, sino también como una Unidad de Manejo de Preservación de Fauna Silvestre (UMA), donde colaboran con instituciones como la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) para la rehabilitación y liberación de ejemplares decomisados, con el objetivo de reintegrarlos a su hábitat natural.
La veterinaria explicó que el halcón swanson, era un polluelo que cayó de su nido en la Universidad de Sonora, fue rescatado y llevado a sus instalaciones para iniciar un proceso de rehabilitación.
En paralelo, también atendieron a un ejemplar de aguililla cola roja, el cual presentaba una lesión en su pata derecha, el cual después de recibir tratamiento y cuidados médicos especializados, se determinó que estaba en condiciones óptimas para regresar a su entorno natural.
“Profepa nos acompaña, nos supervisa y evalúa que en efecto el ejemplar ya está listo para ser liberado, hacen el papeleo necesario y nos acompañan a hacer la liberación”, explicó.
Asimismo, Rebeca mencionó enorgullece de participar en proyectos de conservación, como el del lobo gris mexicano y el lobo rojo americano, que forman parte de un programa binacional de conservación en colaboración con Estados Unidos.
La profesional de medicina veterinaria concluyó haciendo invitación a la comunidad a visitar el Centro Ecológico y disfrutar de los eventos que organizan, sobre todo ahora que el clima se siente más fresco.
También alentó a los amantes de los animales y la naturaleza a unirse como voluntarios, realizar servicio social o prácticas profesionales en el centro, contribuyendo al cuidado de la fauna silvestre de Sonora.