Elecciones 2024: Las más grandes de la historia de México
El miércoles culminaron oficialmente las campañas electorales en México y comenzó el 'periodo de reflexión' del que dispone la ciudadanía antes de la votación. En pocos días serán instaladas 170 mil 256 casillas en México, el 2.3 por ciento dentro del territorio sonorense, lo que equivale a 3 mil 899 de ellas.
De modo que los partidos políticos, las coaliciones y las candidaturas cederán su protagonismo, iniciado con las campañas el 1 de marzo y culminado este 29 de mayo, y pasará a la soberanía de las urnas, a la población que compone la lista nominal, es decir, aquella en condiciones de votar, y a quienes fungirán como funcionarios de casilla.
Dicha lista nominal se compone por 98 millones 329 mil 591 habitantes del territorio mexicano, mientras que en Sonora el universo de votantes comprende a 2 millones 292 mil 68 personas, el 2.3 por ciento del total nacional, cifra que coincide con la proporción de casillas destinadas al electorado sonorense.
Puntos sensibles
En semejante escenario existen algunos puntos sensibles que ameritan la atención de la ciudadanía para asegurar que los comicios reflejen de la manera más cercana posible la voluntad popular.
Algunos de estos, de acuerdo con el último reporte de Integralia Consultores, tienen que ver con la 'hiperjudicialización' del proceso, la violencia política registrada hasta el día de hoy, y el comportamiento de los partidos una vez finalizada la contienda.
Sobre el primero de estos aspectos, la empresa consultora mencionada advierte que “Se anticipa un alto número de impugnaciones debido a financiamiento ilegal de campañas, injerencia del crimen organizado, uso electoral de programas sociales y la intervención de funcionarios. Esto será especialmente probable en elecciones locales con márgenes estrechos entre candidatos”, como indica el documento 'Elecciones 2024', reporte previo a la jornada electoral.
En el campo de la violencia política, sin embargo, la mayoría de las entidades federativas, incluyendo a Sonora, quedan al margen de la probabilidad de ocurrencia de conflictos durante o tras la jornada.
Las excepciones, en ese sentido, son Chiapas, Ciudad de México, Morelia, donde se estima una alta probabilidad de conflictos. Les siguen Guanajuato, Jalisco y Puebla, donde la probabilidad es media y, por último, Tabasco y Yucatán, donde la probabilidad se calcula en niveles bajos, pero no inexistente.
Con respecto al comportamiento de candidaturas y partidos, Integralia Consultores pone el énfasis en el seguimiento a pronunciamientos de triunfo anticipados y desconocimiento de resultados. Sobre lo primero, dice:
“Si bien esto no tiene un impacto directo o inmediato en la gobernabilidad o el clima de negocios, sí puede dar pie al desconocimiento de resultados -y su impugnación- en aquellas entidades con resultados menores a cinco puntos porcentuales”.
Sobre el desconocimiento
“Es altamente probable que desde la misma noche del 2 de junio comiencen las acusaciones de fraude electoral por parte de aquellas candidaturas que resulten perdedoras, lo cual podría mermar la legitimidad de los comicios”.
Contexto demográfico
Se ha comentado, tanto desde las candidaturas del oficialismo como desde las de oposición, que la cita cívica del próximo domingo representa un momento histórico.
En la numeralia esto se refleja en un crecimiento superior al 100 por ciento en la lista nominal tras los últimos 30 años. Durante la jornada electoral de 1994 fueron convocados a las urnas 45.7 millones de personas en condiciones de emitir su voto.
Para 2006, la lista ya contemplaba a 71.4 millones de electores y, este año, la cifra se ubica en 98.4 millones, con lo que se perfila la elección más grande de la historia del país.
De los casi 100 millones de potenciales votantes, cabe mencionar, 13 se ubican en el rango de 65 años o más, mientras que el resto de los grupos etarios que superan los 10 millones de integrantes van de 20 a 34 años de edad. En suma, este conjunto contempla a 33.3 millones de habitantes.