Enrique retiraba su puesto de trabajo, cuando de pronto fue ejecutado
CIUDAD DE MÉXICO.- Enrique estaba por cumplir 16 años cuando fue ejecutado en el puesto de micheladas que atendía, en la alcaldía Iztapalapa.
El adolescente solía vender cervezas afuera de una unidad habitacional, en la colonia Puente Blanco. Sus ventas terminaban en horas de la madrugada. Ayer, eran casi las 3:00, cuando él comenzó a retirar el puesto ambulante de la calle Santa Cruz.
A esa hora, se escuchó el motor de una motocicleta que se detuvo frente al puesto. Eran dos hombres que, al acercarse al lugar, no dijeron palabra alguna. El copiloto descendió del vehículo y, al estar frente a Enrique, desenfundó el arma con la que disparó contra el vendedor.
Carlos, un joven de 18 años, fue testigo del ataque. Al ver huir a los homicidas, el declarante trató de ayudar a su amigo.
Al verlo ensangrentado, lo trasladó al hospital de la zona, pero antes de que fuera ingresado, le informaron que el adolescente había muerto. Él presentaba un disparo en el abdomen, que le provocó la muerte.
Alertados por el testigo, al sitio arribaron familiares del fallecido, quienes al ver a los agentes que indagaban el crimen, los agredieron.
De los homicidas no se supo hacia dónde huyeron, pero los agentes indagan en las cámaras de vigilancia para dar con ellos.