México, líder mundial en estrés laboral
La Organización Mundial de la Salud (OMS) --que identifica este fenómeno como burnout o síndrome de "estar quemado" por desgaste laboral--, advierte que afecta no solo al trabajador sino también a la organización en la que se desempeña.
La Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) especifica que el número de personas con tendencia al burnout es de 44 millones 475 mil personas en México.
En esas circunstancias, es crucial identificar y modificar las condiciones de trabajo que han producido el burnout y, en casos de exposición prolongada, valorar una reubicación del trabajador, un asesoramiento psicológico o acompañamiento en el puesto para rectificar los hábitos adquiridos, advirtió Humberto Bautista Rodríguez, coordinador del Servicio de Psico-Oncología en el Centro Médico Siglo XXI del IMSS.
"Es responsabilidad de las empresas, cualquiera que sea su giro, el estimular la salud mental de sus trabajadores, principalmente porque son las personas que le dan vida a la empresa", agregó Bautista.
Enfermedades mentalesLas personas que tienen mucha exposición social pueden ser más propensas a este tipo de enfermedades mentales, así como las personas que se dedican a la docencia y la atención a víctimas, puntualizó el también vocero especializado de PiSA Farmacéutica en el marco del Día Mundial de la Salud Mental, instituido por la ONU desde 2013 y el cual se celebra cada 10 de octubre.
"Se puede presentar en cualquier ámbito laboral, pero se identifica en mayor medida en todas las profesiones en las que se está en relación directa con el trato al público y clientes", señaló el especialista.
Entre los factores de riesgo personal identificó la baja tolerancia a la frustración, la exposición al estrés o a circunstancias como cuidado de enfermos, enfermedades graves o pérdidas.
Mientras que los factores relacionados con el centro de trabajo son lagunas en las tareas asignadas al puesto de trabajo, sobredimensionamiento de funciones y responsabilidades, ambiente laboral complicado, fallas en el liderazgo en la empresa, sobrecarga de trabajo sostenida, presión asistencial, así como falta de apoyos y recursos.
Entre las señales de alerta previo a presentar burnout, están el dejar de compartir con personas o situaciones que solía disfrutar, padecer de trastornos del sueño como el insomnio, tener los niveles de energía muy por debajo de lo normal, consumir drogas o alcohol en exceso o sufrir cambios de humor repentinos que afectan sus relaciones, explicó Bautista Rodríguez.