Los aviones Boeing 737 MAX y sus polémicas
Los aviones Boeing 737 MAX, del fabricante Boeing Commercial Airplanes, son aparatos modernos que la empresa lanzó para competir con los Airbus A320 y A321. Con bajos costos de mantenimiento, de inmediato despertaron el interés de las aerolíneas y la Administración Federal de Aviación estadounidense (FAA, por sus siglas en inglés) los certificó el 9 de marzo de 2017.
Sin embargo, dos accidentes, uno en octubre de 2018 y otro cuatro meses después, despertaron dudas y la decisión de la FAA de suspender sus vuelos. El 18 de noviembre de 2020, la administración los recertificó y levantó el veto, pero apenas iniciar 2024, han sido suspendidos de nueva cuenta, en medio de dudas sobre su seguridad.
El primer vuelo de un Boeing 737 MAX se realizó en 2016; la empresa anunció con bombo y platillo esta nueva generación de aviones con motores más eficientes, de mayor empuje, con modificaciones en el fuselaje, con bajos costos de mantenimiento. Estas características lo convirtieron en uno de los más vendidos de la historia. Hasta marzo de 2019, había más de 5 mil pedidos.
Los Boeing 737 MAX tienen capacidad para transportar hasta 220 pasajeros. Hasta antes de la nueva suspensión, había 215 aviones MAX 9 en servicio en el mundo, de acuerdo con datos de la empresa Cirium, especializada en análisis de la industria de la aviación. La mayor parte de la flota (casi una tercera parte) fue adquirida por las aerolíneas United Airlines (79) y Alaska Airlines.
En México, Aeroméxico tiene 19 aviones 737 MAX 9 en servicio, actualmente en tierra en tanto se aclara la situación.
¿Qué problemas han presentado los 737 MAX?
En octubre de 2018, un 737 MAX operado por la aerolínea de bajo costo Lion Air, que transportaba 189 personas, partió del aeropuerto de Yakarta, en Indonesia, con destino al aeropuerto Depati Amir, en Pangkal Pinang, en el mismo país. Sin embargo, minutos antes del despegue, se desplomó sobre el Mar de Java.
Cuatro meses después, el 10 de marzo de 2019, otro avión del mismo tipo, operado por Ethiopian Airlines, se estrelló cuando acababa de despegar del aeropuerto internacional Bole, en Etiopía, hacia el de Jomo Kennyatta, en Kenia. Murieron las 157 personas que iban a bordo.
Ante el temor que despertaron los accidentes, la FAA decidieron suspender los vuelos en tanto se investigaba lo ocurrido. Autoridades aéreas mundiales hicieron lo propio.
En mayo de 2019, Boeing reconoció fallos en el software del simulador de vuelo del 737 MAX. También se identificaron problemas en los microprocesadores. Reguladores aeronáuticos europeos (EASA) identificaron otro defecto en el software que fue posteriormente resuelto.
Como resultado de estas dudas, más de 40 países dejaron en tierra sus aviones Boeing 737 MAX y se suspendieron pedidos.
Tras una serie de informes del fabricante, el 19 de noviembre de 2020, la FAA recertificó a los Boeing 737 MAX y suspendió su veto.
Un informe posterior del Congreso de Estados Unidos reveló 'defectos de diseño', pero también una 'cultura de encubrimiento' por parte del fabricante de estos aviones, y un sistema de regulación de la FAA 'fundamentalmente defectuoso'.
Ya recertificada, Boeing realizó inspecciones a los nuevos 737 MAX y dijo que había resuelto un error de suministro. Pero apenas el mes pasado, la FAA llamó a las aerolíneas con este tipo de aviones entre su flota a investigar un posible tornillo suelto en los sistemas de control del timón.
El 5 de enero, los 177 pasajeros de un vuelo de Alaska Airlines vivieron momentos de terror cuando parte del fuselaje se perdió y rompió una ventana, lo que obligó al avión, un 737 MAX 9 a aterrizar de emergencia en Oregon, Portland, en Estados Unidos. Nadie resultó herido, pero se despertaron nuevas dudas sobre la seguridad de estas aeronaves que llevaron a la FAA a ordenar 'inspecciones inmediatas' de todos los aviones Boeing 737 MAX 9. United Airlines, Alaska Airlines suspendieron vuelos con este tipo de aparatos, igual que en México Aeroméxico y en América Latina Copa Airlines, que tiene 21 aviones de esta serie.