Reforma a Banxico pone en riesgo la calificación de México
CIUDAD DE MÉXICO.- El proyecto de decreto para reformar la Ley del Banco de México (Banxico) en materia de captación de divisas vulnera las facultades de la Comisión de Cambios y pondría en peligro la calificación de nuestro país, advirtió a senadores y diputados el gobernador del Instituto central, Alejandro Díaz de León.
"El proyecto de decreto vulneraría la política cambiaria al excluir tanto al Banco de México como a la Secretaría de Hacienda de sus facultades como autoridades competentes en esta materia (Comisión de Cambios); por lo tanto, afectaría la percepción de riesgo soberano en detrimento de la calificación soberana del país", matizó.
Lo anterior debido a que las operaciones cambiarias que se deriven de la iniciativa, implican que el monto y la composición de activos internacionales en Banxico, sería determinado tanto por la banca mexicana como por entidades financieras y autoridades extranjeras, sentenció.
Además, dependería de estas instituciones de recibir o no flujos de efectivo en moneda extranjera en poder del Banco Central, explicó durante su participación en el Parlamento Abierto, organizado por el Congreso de la Unión.
Como consecuencia, sostuvo, los accesos de política cambiaria referidos a estas operaciones quedarían definidos por razones ajenas a las autoridades facultadas para ello, es decir, a la Secretaría de Hacienda y al Banxico.
La afectación sería "considerable", dado que un elemento de importancia de preservar el objetivo del poder adquisitivo de la moneda nacional también depende de la política cambiaria y un comportamiento del tipo de cambio, ponderó.
Agregó que el Banco Central analizó los efectos de lo que podría ocasionar dicho proyecto, pero también lo que se puede hacer para evitar afectaciones de consideración, así como las alternativas para alcanzar los beneficios deseados.
Las remesas son una fuente de ingresos para muchas familias y precisó que crecieron 60% entre 2011 y 2019, y de enero a noviembre de 2020 sumaron 36 mil 446 millones de dólares, lo que representó el 3.9% del Producto Interno Bruto (PIB).
Afirmó que la mayor parte de las remesas no se reciben en efectivo, sino por medio de transferencias electrónicas.
Precisó que en los últimos 10 años sólo el 1.6% del total se recibieron en efectivo y en especie; de enero a noviembre representó el 0.6%, con base a las encuestas que recaba el Inegi.