Julian Assange es declarado "un hombre libre"; le prohíben regresar a EU
Julian Assange, fundador de WikiLeaks, ha sido liberado tras una condena ya cumplida en el Reino Unido como parte de un acuerdo con el Departamento de Justicia de Estados Unidos.
La sentencia fue dictada este martes en el tribunal federal de Saipán, capital de las Islas Marianas del Norte, por la jueza de distrito Ramona Manglona.
Assange, quien se declaró culpable de violar la ley de espionaje estadounidense, fue sentenciado a una pena de 62 meses, ya cumplida durante su reclusión en la prisión de máxima seguridad de Belmarsh en el Reino Unido.
La jueza Manglona consideró que el tiempo que Assange pasó en prisión fue “justo y razonable” y decidió no imponer un periodo de libertad supervisada adicional.
"Usted podrá salir de esta corte como un hombre libre", afirmó la jueza, lo que provocó lágrimas de emoción en Assange.
El acuerdo de culpabilidad implica que Assange debe ordenar la destrucción de la información en poder de WikiLeaks y proporcionar una declaración jurada de que se ha cumplido con esta orden. Además, según el Departamento de Justicia de Estados Unidos, Assange tiene prohibido regresar a territorio estadounidense sin permiso expreso.
Assange fue acusado de conspirar con Chelsea Manning, una exanalista de inteligencia del ejército estadounidense, para obtener y divulgar ilegalmente documentos clasificados relacionados con la defensa nacional. Estos documentos, publicados en WikiLeaks, incluían diarios de guerra y cables diplomáticos que revelaban irregularidades cometidas por militares estadounidenses en Irak y Afganistán.
Jennifer Robinson, parte del equipo legal de Assange, expresó su preocupación por el precedente peligroso que sienta esta acusación, alertando sobre la amenaza que representa para la libertad de expresión y la responsabilidad democrática.
"Estados Unidos pretende ejercer jurisdicción extraterrestre sobre todos ustedes sin darles protección constitucional a la libertad de expresión, y cualquiera que se preocupe por la libertad de expresión y la responsabilidad democrática debería oponerse", afirmó Robinson.
A la salida de la corte, Assange fue recibido con una gran ovación. Aunque no emitió declaraciones, saludó a sus seguidores antes de dirigirse a su vehículo. Se espera que Assange regrese a su Australia natal para reunirse con su esposa, Stella Assange, y sus dos hijos.
Los abogados de Assange destacaron que el trabajo de WikiLeaks continuará, y que Assange seguirá siendo una fuerza por la libertad de expresión y la transparencia en el gobierno.
"La voz de Assange es poderosa y no puede ser silenciada", subrayaron.
Este desenlace marca el final de una prolongada batalla legal que comenzó en marzo de 2018, cuando Assange fue acusado por primera vez en el Distrito Este de Virginia.