Reino Unido confirma primer caso de nueva variante de mpox en Londres

Las autoridades británicas confirman un primer caso de la nueva variante de mpox en un paciente procedente de África; el riesgo es bajo, aseguran.
Foto: Especial / EXPRESO.

Las autoridades sanitarias del Reino Unido han confirmado el primer caso de la nueva variante de mpox, anteriormente conocida como viruela del mono, en un paciente que regresó recientemente de África.

La Agencia de Seguridad Sanitaria de Reino Unido (UKHSA, por sus siglas en inglés) ha informado que el afectado comenzó a mostrar síntomas al llegar a Londres, donde fue rápidamente hospitalizado y remitido a una unidad especializada en enfermedades infecciosas.

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Para proteger la privacidad del paciente, las autoridades han evitado proporcionar información detallada sobre su identidad o estado, limitándose a confirmar que se encuentra bajo observación médica en Londres.

A su vez, los especialistas de la UKHSA monitorean a sus contactos cercanos para descartar cualquier riesgo de propagación, aunque han asegurado que, por el momento, el riesgo para la población general "sigue siendo bajo".

Emergencia internacional

La Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró a mediados de agosto una emergencia internacional a causa de esta nueva variante de mpox, que mantiene una presencia activa en la República Democrática del Congo y otros países africanos.

La propagación ha sido monitoreada en Europa, con casos confirmados en Suecia, Alemania y ahora en el Reino Unido, lo que refuerza los controles sanitarios en aeropuertos y centros médicos.

Aunque la incidencia de mpox en Europa es baja, las autoridades subrayan la importancia de mantener la vigilancia, especialmente entre quienes han viajado a zonas de alta prevalencia.

La UKHSA recomienda a la población acudir a atención médica en caso de síntomas compatibles, como fiebre, erupciones o inflamación de ganglios, y recuerda que los protocolos de aislamiento son fundamentales para controlar la infección.

El caso en Reino Unido es el más reciente de una serie de contagios internacionales que han encendido las alarmas en varios países europeos, lo que subraya la necesidad de mantener medidas preventivas y una pronta respuesta médica en caso de nuevos brotes.