¿Nueva pandemia? La OMS en alerta por viruela del mono
El Comité de Emergencia de la OMS se reunirá pronto para evaluar si la viruela del mono merece el nivel más alto de alerta. La epidemia afecta a varios países africanos.
Tedros Adhanom Ghebreyesus, director de la OMS, anunció la convocatoria del comité para determinar si la situación constituye una emergencia de salud pública de alcance internacional.
Uganda reportó recientemente sus primeros casos de viruela del mono en las ciudades de Mpondwe y Bwera, cerca de la frontera occidental. Kasese, el distrito afectado, se une a la creciente lista de regiones impactadas.
Kenia y Burundi también han registrado casos, con uno y tres respectivamente, el mes pasado. RD Congo, por su parte, reportó 11,000 casos y 450 decesos hasta el 20 de julio.
Ruanda y Costa de Marfil informaron sobre nuevos casos de viruela del mono en los últimos días. La situación se agrava con la posibilidad de una propagación internacional.
¿Cuáles son los síntomas?
La enfermedad se caracteriza por erupciones cutáneas que pueden aparecer en los órganos genitales o en la boca, fiebre, y dolor en la garganta o a nivel de los ganglios linfáticos.
El contagio de la viruela del mono puede ocurrir mediante contacto directo con la piel o fluidos corporales infectados, incluido el contacto sexual. La OMS insta a la vacunación de las personas en riesgo.
Los países africanos afectados toman medidas urgentes para controlar la epidemia y evitar su propagación. Las autoridades locales trabajan en conjunto con la OMS.
La viruela del mono presenta síntomas notables, como erupciones cutáneas, fiebre y dolor en la garganta. La identificación temprana es crucial para controlar la propagación.
El contacto directo con piel o fluidos corporales infectados, especialmente a través del contacto sexual, facilita el contagio. La prevención se basa en la vacunación y medidas de higiene rigurosas.
Recomendaciones
Las autoridades de salud recomiendan evitar el contacto cercano con personas infectadas y seguir protocolos de desinfección. La vigilancia constante y la educación pública son esenciales.
La OMS y los gobiernos locales trabajan arduamente para contener la epidemia. La cooperación internacional es clave para evitar una crisis sanitaria global.
Las campañas de vacunación y la concienciación sobre los métodos de contagio son fundamentales. La colaboración entre países ayudará a detener la propagación y proteger la salud pública.
La situación requiere una respuesta inmediata y coordinada. La comunidad internacional debe estar alerta y preparada para actuar rápidamente.