Papa Francisco inicia audiencias jubilares del Año Santo

El Papa Francisco inauguró las audiencias jubilares, destacando la esperanza como virtud para "volver a comenzar".
Papa Francisco. (Foto: Especial / EXPRESO)

El Papa Francisco inició este sábado las audiencias jubilares, que se celebrarán cada 15 días como parte de las actividades del Año Santo en Roma. Estas se suman a las habituales Audiencias Generales de los miércoles y están dirigidas a los peregrinos que visiten la ciudad.

En su mensaje inaugural en el Aula Paulo VI, el Santo Padre destacó que el Jubileo representa una oportunidad para un nuevo comienzo, un retorno a Dios. “Con el Jubileo se comienza una nueva vida, una nueva etapa”, afirmó.

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La esperanza, virtud central del mensaje

El Papa centró su discurso en la esperanza, definiéndola como una virtud teologal que no es solo un sentimiento, sino una fuerza proveniente de Dios que debe ser solicitada a través de la oración.

La esperanza no es algo que se posee, sino una fuerza que hay que pedir. Por esto nos hacemos peregrinos: venimos a pedir un don para volver a partir por el camino de la vida.
Papa Francisco.
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Vinculación con el Bautismo de Jesús

Anticipándose a la celebración de la fiesta del Bautismo de Jesús, el Papa reflexionó sobre el significado del acto de Juan el Bautista. Destacó cómo este simbolizaba el deseo de un nuevo comienzo, al igual que el Jubileo, que invita a atravesar una "Puerta Santa" espiritual para recibir la gracia de un nuevo inicio.

“Hermanas y hermanos, volver a comenzar. Esta es la palabra: volver a comenzar, recibir la tierra desde el inicio, como la primera vez”, señaló el Sucesor de Pedro.


Un llamado a la renovación espiritual

El Año Santo y las audiencias jubilares buscan fomentar en los peregrinos un sentido de renovación espiritual y esperanza. El Papa Francisco subrayó la importancia de caminar en fe, enfrentando los desafíos de la vida con una renovada confianza en la gracia divina.

Las próximas audiencias jubilares seguirán desarrollándose cada 15 días, brindando a los fieles de todo el mundo la oportunidad de participar en este momento de profunda espiritualidad en el corazón de Roma.