Cómo identificar signos de ansiedad y estrés ante el regreso a clases

El regreso a clases supone un cambio en la rutina que puede ocasionar estrés y ansiedad en los estudiantes.
Conocer estrategias de relajación puede contribuir a su bienestar. (Foto: Jesús Ballesteros/EXPRESO)

Este lunes regresaron a clases alrededor de 26 mil alumnos de educación básica en Sonora, lo que significó el inicio de un nuevo ciclo escolar y un cambio en la rutina de niños y adolescentes.

Dicha transición podría ocasionar inestabilidad emocional en los menores, por lo que es importante identificar los signos de ansiedad y estrés que pueden impedir el aprendizaje y su desarrollo integral.

Karla Zulema Ríos, coach profesional de transformación personal, compartió en la cápsula 'Consciente tu Mente' del noticiero 'Expreso 24/7' las señales de ansiedad y estrés por el regreso a clases que son importantes identificar en niños y adolescentes para ayudarlos.

¿Cuáles son los síntomas?

Uno de los ámbitos donde se reflejan es la salud física, con síntomas que van desde dolores de cabeza hasta problemas gastrointestinales. Las siguientes señales podrían revelar que los niños viven ansiedad y estrés ante un cambio de rutina y la separación de sus figuras afectivas, además de nuevas circunstancias que pueden presentarse también en el ámbito familiar.

  • Dolor de cabeza
  • Dolor muscular
  • Cansancio
  • Dolor de estómago
  • Náuseas
  • Diarrea
  • Insomnio
  • Pesadillas
  • Falta o exceso de apetito

En el ámbito emocional, expone Ríos, padres de familia y colaboradores de instituciones educativas pueden observar que parte de la población estudiantil manifiesta preocupación excesiva o expresan sentimientos de insuficiencia, además de que podrían presentar miedo excesivo que ocasiona que se paralicen y les impide concentrarse.

Los adolescentes, al experimentar estrés y ansiedad, pueden mostrar conductas desafiantes y problemas con sus compañeros, actitudes derivadas de sentimientos de miedo y tristeza que genera la inseguridad que pueden sentir en el ámbito escolar. Esto puede llevar al consumo de sustancias o trastornos de la conducta alimentaria: con la finalidad de llenar un vacío emocional, los jóvenes sufren atracones, comen en exceso o dejan de comer; recurren al consumo del alcohol o comienzan a consumir drogas e incluso buscan el amor en el exceso de la práctica de sexo. Estas conductas pueden derivar en lo que se conoce como 'relaciones tóxicas'.

¿Cómo podemos ayudar?

Madres, padres y docentes pueden ayudar a los adolescentes y atender estos signos de ansiedad y estrés en la población estudiantil con distintas herramientas. La coach Karla Zulema Ríos comparte las siguientes prácticas:

  • Entrar en intimidad emocional: los padres y docentes pueden ayudar al alumno creando un ambiente favorable donde se sienta seguro para expresar sus sentimientos y pensamientos.
  • Actitud de escucha activa: escuchar los problemas y emociones del estudiante resulta esencial para conectar y lograr dialogar de corazón a corazón.
  • Invitar a relajarse: si un alumno está pasando por una crisis de ansiedad, es importante guiar su respiración con voz tranquila, dirigiendo inhalaciones y exhalaciones por la nariz a un ritmo pausado y constante.

Conocer y tomar en cuenta estas estrategias es esencial para que padres de familia y profesores contribuyan al bienestar emocional de los jóvenes y puedan aprovechar la escuela como un espacio para aprender, disfrutar y trabajar.