Familias de San José de Guaymas perdieron todo por las inundaciones

La familia Alvelaiz es una de las tantas familias que vieron cómo su patrimonio fue arrasado por el arroyo San José que pasa sobre el poblado La Salvación en el ejido San José de Guaymas.
Daniela Martínez/EXPRESO

La familia Alvelaiz, avecindada en el poblado La Salvación, del Ejido San José de Guaymas, fue una de las cientos de familias que perdieron todo con las lluvias registradas en días pasados.

Guadalupe Alvelaiz García, pilar de un hogar que alberga a seis integrantes, comentó que cuando el agua empezó a tomar un nivel considerable en su vivienda, luego de que el arroyo de San José empezó a desbordar, decidieron cerrar las puertas y abandonar su casa para resguardarse en una zona alta.

Eso, porque ya tenían antecedentes desde hace 13 años, comentó que cuando azotó el huracán Jimena, también tuvo pérdidas totales en su domicilio, pero al ser de escasos recursos, tuvo que volver a empezar a habilitar su casa en el mismo sitio, una zona que sabe que es de riesgo, pero que es el único sitio en el que ha podido establecerse.

“Yo no tengo dinero para irme a otro lugar, comprar un terreno y volver a construir desde cero, después del huracán Jimena nos dimos cuenta que estábamos en una zona de conflicto, pero no podemos irnos a otro lado, esto es lo que tenemos”, lamentó la señora Guadalupe.


Ahora bien, lo que le toca dijo, es buscar la forma de conseguir más casas que limpiar para ganar más dinero, porque actualmente trabaja tres días a la semana para poder llevar sustento a su casa y al haber perdido su despensa, ropa, refrigerador, lavadora, camas y demás muebles, se vendrán tiempos difíciles.

Sobre todo, dijo, cuando tiene la responsabilidad de apoyar a sus hijos, uno porque acaba de quedar sin trabajo debido a un accidente que tuvo y otro porque trabaja por contratos y actualmente no tiene uno vigente y, tienen en puerta los gastos de regreso a clases de dos menores.

Como esta, varias familias de los diferentes poblados de San José de Guaymas, resultaron damnificadas y con pérdidas totales, algunas siguen en sus viviendas buscando la forma de rescatar algo, mientras que otras se internaron en albergues temporales porque decidieron cuidar su integridad física, antes que sus bienes materiales.