Día de las Madres: Policía y mamá, un reto para la agente Gema García
HERMOSILLO, SON.- El no ver tanto tiempo a su hijo como el que ella desearía ha sido uno de los sacrificios más grandes para Gema Lucía García Ballín, quien aseguró que vale
la pena el esfuerzo, ya que darle a su pequeño un mejor futuro es su prioridad como madre; mientras que al mismo tiempo demuestra sentirse orgullosa de su profesión como agente de la Policía Estatal.
Soñaba con ser policía Gema compartió que trabajar en ese sector era un sueño que ella tenía desde pequeña, pues quería ayudar a la gente, protegerla y resguardarla, labor que ha
realizando desde hace 12 años en la Secretaría de Seguridad Pública (SSP).
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Sin embargo, su familia se opuso, pues no quería que trabajara como agente de la policía, ya que es una labor muy peligrosa. Pero, con el paso de los años, ha sido muy bien aceptada esta decisión.
“Hay que quitar esa idea de que la mujer es el sexo débil, que no puede. Aún hay veces en las que todavía lo dicen, en su mayoría la gente se ha quedado con esta idea, enfatizó.
Comentó que ella siempre absorbe los comentarios positivos de su profesión, e incluso su hijo la presume en la escuela cuando preguntan a qué se dedica su mamá.
Oficio que demanda sacrificios
García Ballín compartió lo que sintió como madre luego de que su pequeño naciera, pues su trabajo es un oficio que demanda mucho tiempo, por lo que no puede pasarlo con su hijo.
“Cuando tuve a mi hijo comenzó lo más difícil, ya que mi trabajo es andar fuera de mi casa. Es un horario de 12 horas por necesidades del servicio que debemos prestar; a veces no se puede dar un tiempo de vacaciones para convivir”, detalló.
Comentó que ella procura siempre darle tiempo de calidad a su familia, convivir, salir con su hijo, prepararle el desayuno, consentirlo. Agregó que aprovecha el momento y convive con él con mucho amor.
“Mi hijo, al ver a un policía, se enorgullece mucho, y saber que mi pequeño siente orgullo por mí me causa mucha alegría”, recalcó.
Como perspectiva de madre que labora incansablemente todos los días, perdiéndose las fechas importantes, agregó que sabe que es complicado, pero que a futuro valdrá la pena.
“Siempre déjense apoyar, ya sea de su familia o amigos, porque la educación de los niños siempre es difícil cuando uno está lejos del hogar, pero siempre hay que explicarle a los niños antes de irnos, decirles que vamos trabajar, porque muchas veces nos vamos a escondidas para que el niño no llore; recomiendo paciencia y fuerza”, concluyó.