eSOS | Guayacán, el árbol sonorense de flor hermosa
HERMOSILLO, SON.- El guayacán(Guaicum coulteri) es una especie de arbusto o árbol que también forma parte de la flora de Sonora y que debido al aprovechamiento forestal maderable que se le daba, actualmente se encuentra como amenazada (A) dentro de la NOM-059-SEMARNAT-2010.
También es conocido como palo santo y pertenece a la familia de zygophyllaceae. Es una especie endémica de los estados de Sonora, Sinaloa, Nayarit y Jalisco y desde 2010 se incluyó en la lista de especies en alguna categoría de riesgo, dentro de la Norma Oficial Mexicana. Anteriormente estaba catalogada como una especie sujeta a protección especial dentro de la norma, pero debido a la gran demanda que tiene su madera, al ser muy resistente, se fue reduciendo su población, pasando así a la siguiente categoría: amenazada.
Su distribución en Sonora
En el caso específico de Sonora, el Guaiacum coulteri se encuentra distribuido principalmente en zonas con clima desértico, tanto en la zona centro y sur de Sonora, principalmente en la selva caducifolia.
En México también existe otra especie de guayacán (Guaiacum sanctum), el cual se distribuye en entidades más al sur, pero que no es considera endémica por la Norma Oficial Mexicana, ya que también está presente en países de Centroamérica y Estados Unidos.
Madera muy dura
Teresita de Jesús Lasso López, investigadora de la Comisión de Ecología y Desarrollo Sustentable del Estado de Sonora (Cedes), señaló que la madera del guayacán se asemeja a la madera que tiene el palofierro, lo que la hizo muy solicitada para ese aprovechamiento. “La madera del guayacán es muy dura, por eso era muy utilizada y sobre todo muy solicitada en la carpintería para la fabricación de muebles y otros usos”, detalló la investigadora, no sin antes recordar que por su estatus de amenazada dentro de la norma 059 de Semarnat ya no se permite que tenga ese uso.
Hermosa flor
Aunado a la resistencia de su madera, Lasso López añadió que este árbol posee una flor muy hermosa, de color violeta, cualidad que hace que muchas personas quieran tener este árbol en los jardines de sus casas.
“En verdad que en la época de florecimiento del guayacán da una flor muy bonita, es un árbol que florece de los meses de febrero a julio, árboles muy vistosos que pudiera darnos una belleza escénica”, refirió la entrevistada.
La investigadora del Cedes detalló que en su hábitat natural es un árbol que está muy disperso, pero que sigue presente en las entidades donde es endémico, aunque disminuyendo su población cada vez más, motivo por el cual actualmente está incluido dentro de las especies amenazadas de la NOM-059-SEMARNAT-2010.
Esta especie, subrayó, tiene una función especial dentro de su ecosistema, ya que es mucha la época de floración y son muchos los polinizadores que se alimentan del néctar de las flores, principalmente abejas, colibríes y mariposas, incluso hay una mariposa a la que se le dio el nombre de “Mariposa del guayacán”.
Los insectos (mariposa del guayacán) no sólo aprovechan el polen que extraen las flores del guayacán, dijo, sino que ponen sus larvas en sus hojas y se alimentan de ellas, creando así una especie de simbiosis, dijo.