Guaymas: Así reaccionaron Alfredo y Roberto, los "héroes" del accidente en panga
GUAYMAS, SON.- Los nombres y fotografías de los pescadores Alfredo “El Cuate” Piña y Roberto Zamora han llenado las redes sociales y las conversaciones en Guaymas y Empalme, como reconocimiento por el rescate de once personas que sobrevivieron al naufragio de una panga el domingo 5 de junio en la zona de “El Paraje Viejo”, mientras que ellos no han hablado del suceso públicamente y a la tarde del lunes se fueron a trabajar al mar.
Silvia Gastélum Morales, esposa de Alfredo, comentó que esa tarde llegó muy asustado a su casa, ya que nunca había presenciado un accidente de esa magnitud, y que, durante su ausencia, las hijas de él le llamaron creyendo que había tenido un accidente, pero no, él pescador y su compañero habían auxiliado a las víctimas, porque de manera casual, ellos navegaban en el área en busca de carnada para la pesca cuando vieron la panga ir de picada y todos los tripulantes, caían al agua sin poder nadar.
“Cuando él llegó a la casa me empezó a contar, pero se le veía el sentimiento por todo lo que vio y me dijo: no, ahorita quiero bañarme y dormir; pero no durmió porque estaba muy impactado por lo que vivió y no le quise preguntar mucho por como lo miraba”, dijo.
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Alfredo tiene su domicilio en la colonia Rastro Playa, pertenece a la sociedad cooperativa Ensenada Grande y es muy conocido en el gremio de los pescadores, y según su esposa, mientras hacían las compras para el viaje no dejaba de sonar el teléfono, entraban llamadas de amigos que querían preguntarle del hecho y felicitarlo, y él, desconcertado, decía que lo único que quería en ese momento era irse a trabajar.
“Ese día lo regañé mucho antes de salir, porque él es muy trabajador y estaba desesperado por ir a conseguir carnada, yo le dije que se esperara porque el tiempo estaba muy feo, que se tenía que esperar a que se calmara. Cuando regresó me dijo: tanto que me regañaste y apenas Dios sabe por qué hace las cosas, él nos puso ahí para ayudar a esas gentes, una señora de Nogales me decía: falta una niña de dos años, búsquenla, me falta esa niña, y de los niños que subió uno llevaba su piecito quebrado y decía rescaten a mi abuelo, está en unas piedras, eso fue lo que me platicó, ya no platicó más”, relató.
Alfredo y Roberto se dedican a la pesca de buceo, y por el mal tiempo que ha revuelto el agua decidieron irse a un rumbo más alejado a pescar con piola, y el gremio ribereño, como su familia y amigos, los esperan de regreso el fin de semana para recordarles que ese domingo fueron unos héroes al salvar once vidas en el mar.