María Lourdes es una mujer de retos, ahora en la carpintería

La mujer de 64 años siempre busca romper los paradigmas y ahora se aferra a sus herramientas para seguir desarrollándose como carpintera en Cajeme.
María Lourdes siempre busca estar en movimiento. (Foto: Ana Camargo/EXPRESO)

Para María Lourdes Camacho Gutiérrez, uno de los principales retos en la vida ha sido romper los paradigmas en su ambiente laboral; prueba de ello es que ahora se dedica al oficio de la carpintería, una actividad que comúnmente es realizada por hombres.

La señora de 64 años, quien por lo general luce una sonrisa en el rostro y un humor positivo, cursa el cuarto nivel del taller de carpintería que realiza el Instituto Cajemense de la Mujer, donde ha tenido la oportunidad de fabricar diversos muebles, y está por aprovechar estos conocimientos para que se convierta en su trabajo principal.

“Ya tengo casi un año en la carpintería. Entré a este taller porque vi que lo anunciaron en Facebook, yo andaba buscando un taller de este tipo porque la verdad no me gusta estar quieta, y siempre me han gustado los trabajos pesados o que no son tan comunes para nosotras las mujeres”, expresó.

Con sus conocimientos, María Lourdes ya ha fabricado bancos, escritorios, bancas de jardín, entre otro tipo de muebles que ahora están en su hogar, o en los de su familia.


Dominio de herramientas

Sin temor alguno, y sí con gran seguridad, la señora hace uso de aparatos como cortadoras, taladros atornilladores, martillos, entre otros, además de tamaños grandes de madera, de las cuales aprovecha cada centímetro para hacer sus creaciones.

“La carpintería es lo mejor, es lo que más me ha gustado, en mi casa siempre fuimos puras mujeres, mi papá me enseñó a clavar y usar aparatos como éstos, yo creo que por eso me gustan los trabajos pesados”, señaló.


Otros trabajos

Cabe señalar que la carpintería no ha sido el primer trabajo extraordinario para María Lourdes, ya que durante 16 años trabajó en el puerto de Guaymas vendiendo periódicos en las calles de ese municipio, donde ella misma se califica como “la mejor” porque siempre fue la que vendió el mayor número de impresos en el día.

Y es que le daba un toque especial a su labor, ya que se vestía en su horario laboral conforme a la fecha del año. En ocasiones se puso trajes de Santa Claus en Navidad; de Adelita en el Mes Patrio, y hasta de bruja en la temporada de Halloween.


Siempre ser la mejor

Es también madre de familia y exhorta a todas las mujeres para que siempre se esfuercen en aprender y nunca se limiten con alguna actividad, ya que todas pueden descubrir un gran talento que las haga triunfar.

“Hay que luchar, no por ser mujer se va a quedar uno estancado, tienen que salir adelante y aprender lo que supuestamente para la sociedad es de hombres, al final cuando una lo hace se da cuenta que lo puede llegar a hacer mejor que ellos”, destacó.

María Lourdes es madre de tres hijos que ya son adultos e independientes, por lo que ahora busca aprovechar este tipo de talleres para trabajar y mantenerse ocupada.