Estos municipios de Sonora están en riesgo ante gran sismo que ocurre cada 100 años

Los municipios de Agua Prieta, Nacozari y pueblos cercanos se encuentran en riesgo de gran sismo luego de que los temblores fuertes ocurren en un periodo de 100 años y el último detectado en esta región del noroeste ocurrió el 3 de mayo de 1887, por lo cual, actualmente se está dentro del período donde pudiera ocurrir otro.

A lo largo de la falla Pitaycachi, la cual empieza en Batepito y culmina cerca de Agua Prieta sucedió tal suceso histórico donde el movimiento de las placas alcanzó una magnitud de 7.4 grados en la escala de Richter, ocasionando destrucción de hogares, pérdidas humanas e incendios.

En entrevista para la edición matutina del noticiero Expreso 24/7 con Lorenza Sigala, Alfredo Mendoza, ingeniero civil con candidatura a doctor en ciencias de la tierra, explicó que en la actualidad se han registrado temblores de baja intensidad que se han sentido en Bavispe y Bacerac y esto podría ser una señal de que la falla de Pitaycachi se está activando.

“Una falla que está inactiva se puede activar a los 100 años es posible que se este activando la falla de Pitaycachi y es por eso es que se sienten temblores en la parte serrana de Sonora”, dijo,

“Desgraciadamente se va dar pero el problema es que no sabemos cuándo, entre más pase el tiempo la posibilidad va ser mayor”.

Precisó que esta falla se extiende por 100 kilómetros y la última vez que ocasionó temblor en el año 1887 afectó considerablemente a los municipios de Bavispe, Bacerac y Fronteras donde las iglesias se derrumbaron, la sierra ardió y generó la muerte de 600 personas aproximadamente.

“En ese entonces las construcciones eran de adobe y los pueblos cercanos quedaron muy dañados, las iglesias derrumbadas, la sierra ardió porque cuando la roca se rompe y se desplaza roca contra roca se calienta y si hay pasto o leña seca pues se enciende”, comentó.

El especialista contó que en ese entonces el máximo desplazamiento vertical que se dio en segundos fue de 4 metros y para esto se necesita mucha energía que se acumuló entre rocas que estaban situadas entre Batepito y Fronteras.

“Todavía la ciencia no desarrolla un método para predecir un sismo, las viviendas que se podrían ver más afectadas son las que no tienen castillos, refuerzos, que no están consignadas por una estructura primaria, las estructuras de adobe son muy susceptibles a dañarse con movimientos telúricos”.