Más idioteces del exfiscal especial
"Más idioteces del exfiscal especial", escribe Carlos Marín en #ElAsaltoalaRazón
Hace una semana se supo de la captura en El Ocotito, Guerrero, del excomandante de la Policía Ministerial de Guerrero, Javier Bello Orbe, involucrado en la desaparición de los normalistas de Ayotzinapa. La detención habría ocurrido el jueves 5 de diciembre y se le ingresó al penal del Altiplano, donde permaneció seis días porque antier, miércoles 11, fue dejado en libertad, no por corrupción o negligencia del vituperado Poder Judicial sino por la estulticia del exfiscal especial Omar Gómez Trejo.
La patinada se da a pocos días del encuentro entre los padres de Los 43 y la presidenta Claudia Sheinbaum, quien ofreció revisar los expedientes con un nuevo equipo y una nueva ruta.
En la mañanera del martes, el subsecretario de Derechos Humanos de la Secretaría de Gobernación, Félix Arturo Medina Padilla, aseguró que el caso “no será abandonado y no habrá carpetazo”.
Compromiso esperanzador, supusieron los padres… que se incumplió al día siguiente con la liberación de Bello Orbe.
Su excarcelación prueba una vez más la incapacidad de la mentirosa Comisión de la Verdad y Acceso a la Justicia y de la FGR para enderezar la rama acusatoria del pillastre Omar Gómez Trejo, durante cuya gestión se gestó una retorcida acusación contra Bello.
Raquel Duarte Cedillo, juez segundo de Distrito en Materia Penal con sede en Toluca, dictó este miércoles la libertad al excomandante por los delitos de delincuencia organizada y desaparición forzada de personas porque “no existe ninguna imputación de alguna víctima o testigo en su contra” y no haber “elementos de su implicación en la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa”.
En vez de profundizar en lo que realmente dejó de hacer o hizo junto con un subordinado (omisiones precisadas en la Recomendación de la CNDH anterior a Rosario Piedra) y formular una acusación robusta ante los tribunales, la Fiscalía Especial optó por un camino imaginario y desdeñó lo que está demostrado en la Recomendación aludida y que ocurrió en el Puente del Chipote, pero con la actuación de otros protagonistas: policías municipales de Iguala, Huitzuco y otras que interceptaron el autobús 1531, obligándolo a detenerse baleando los neumáticos y conminando a los normalistas a descender arrojándoles al interior de la unidad gas lacrimógeno (después fueron subidos a tres camionetas de la Policía de Huitzuco y una de Iguala para llevarlos al basurero de Cocula).
Ni Bello Orbe ni Eliohenay participaron en eso, pero la FGR, con Gómez Trejo, les formuló acusaciones por ambos hechos.
La menor de las responsabilidades de estos agentes ministeriales deviene de actos omisivos que la Fiscalía, por lo visto, simplemente desconoce.
Esos son los problemas que generan la falta de responsabilidad y honestidad intelectual.
La célebre Recomendación de la CNDH ha venido usándose en lo que se ajusta a las peregrinas tesis que intentan sustentar. Lo que no les es útil lo desechan.
Así descontextualizan y desnaturalizan los argumentos y las pruebas…
Carlos Marín
cmarin@milenio.com