SAN LUIS, ES EL PEOR…
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SAN LUIS, ES EL PEOR…
Por estos días en que se ha informado mucho sobre las crecientes estadísticas de homicidios en Sonora, cualquiera pensaría que los récords de ejecuciones siguen dándose en Ciudad Obregón o incluso Hermosillo, pero no, el municipio que este año más empeoró en ese macabro recuento es San Luis Río Colorado.
Resulta que de enero a agosto de este año hubo 56 homicidios dolosos en San Luis, contra 18 en el mismo lapso de 2018, para un incremento porcentual del 211%…
El segundo lugar, efectivamente, es Hermosillo que pasó de 99 a 161 homicidios dolosos, un aumento de 62%…
El tercer lugar se lo llevó Nogales (37- 53, 43%) y Cajeme el cuarto lugar, aunque con muchas más muertes violentas pues de 138 el año pasado brincó a 188 este año, creciendo 36%.
¿Le sorprende enterarse de esta realidad?…
Pues más sorprende saber que en Guaymas solamente aumentaron 16% los homicidios dolosos, pues pasaron de 36 entre enero y agosto del año pasado a 42 este año, aunque las muertes de varios policías y la extrema violencia hacen parecer que el Puerto estaría entre lo peor…
En fin, son cosas de realidades contra percepciones.
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SIN HACER RUIDO…
Sin hacer mucho ruido se consumó la elección de una nueva dirigencia del Sindicato de Trabajadores Académicos de la Universidad de Sonora (Staus), con la planilla Dorada-Azul como la ganadora para llevar al maestro Sergio Barraza a ocupar nuevamente la secretaría general bajo su bandera de dignificación laboral y de entrelazamiento generacional en su comité.
En este espacio comentamos que quienes ocuparan la nueva dirigencia del Staus tendrían ante sí la tarea de calificar, el año próximo, el cumplimiento de los recientes compromisos adquiridos por la administración universitaria y el Isssteson ante ese sindicato, pues las negociaciones no tuvieron el consenso generalizado entre la planta docente.
Luchar por mejores salarios, lograr para los profesores más espacios en la administración de la Universidad y permitir una mayor vinculación del sindicato con la sociedad, fueron parte de la oferta que Barraza y sus compañeros expusieron ante la bases para hacerse de la dirigencia por los próximos dos años.
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SOSPECHOSA NEGLIGENCIA
Para no variar, el Gobierno Municipal de Navojoa dio esta semana muchas cosas de qué hablar y escribir, pero aquí “Entre Nos” tomamos con el tufo a conflicto de interés que se asomó en el caso del desistimiento de la demanda que “inocentemente” firmó el síndico municipal Jesús Guillermo Ruiz y que permitirá al extesorero Ramón Grajeda cobrar seis millones de pesos como indemnización y, en un descuido, hasta lo tienen que reinstalar en el cargo del que fue corrido en el año 2003.
La sospecha viene porque quien habría dado la recomendación al Síndico para ese tan criticado desistimiento es el actual director del Jurídico, Felipe Abel Merino, pero a quien se recordó como el primero abogado que por parte de Ramón Grajeda demandó al Ayuntamiento…
Es decir, que el demandante de entonces es quien debería haber sido el defensor de hoy.
El comentario en Navojoa es que se dio alrededor del caso una sospechosa negligencia y que la alcaldesa Rosario Quintero debería ordenar una investigación, pues si se la lleva con puro lamento por la ruina de la Tesorería, nadie se explica cómo no se enoja porque su equipo permitirá el pago de la millonaria suma…
Total, en la Perla del Mayo a cada rato sacan el cobre.
