Más allá de los titulares: tres conflictos que no se cuentan
"Más allá de los titulares: tres conflictos que no se cuentan", escribe Mauricio Meschoulam en #ColaboraciónEspecial
En todo el planeta hay cosas sucediendo más allá de los temas que han acaparado la agenda en los últimos años. Hoy comparto apenas unas notas al respecto de tres de esos temas: Afganistán Sudán y Myanmar.
1. Afganistán. Han pasado ya tres años desde el repliegue estadounidense de Kabul, y la situación sigue siendo muy delicada. En ciertos espacios había expectativa de que los talibanes se comportaran de maneras más moderadas. A pesar de cierto pragmatismo en algunos de ellos, los derechos de las niñas, las mujeres, las minorías, han sido fuertemente vulnerados. Adicionalmente, los posicionamientos y conductas de las superpotencias globales y las potencias regionales, importan.
China fue el primer país en aceptar a un embajador talibán. Otros países, como las monarquías del golfo, han ido estableciendo un proceso gradual de reconocimiento. EAU ya recibió a un embajador talibán, y Rusia, quien sí negocia con los talibanes, aunque aún no reconoce formalmente a su gobierno, propuso ya removerles de las listas de organizaciones terroristas en el mundo.
A pesar de todo ello, la filial afgana de ISIS se ha mantenido creciendo, amenazando no sólo a los talibanes, sino también a otros países de la región y del globo. Así, el dilema para EU sigue siendo: ¿cómo mantener un equilibrio para presionar a favor de la agenda de derechos humanos en Afganistán, y al mismo tiempo, cooperar con Kabul para avanzar temas humanitarios y también en temas de terrorismo?
2. Sudán. El más reciente conflicto en Sudán, el tercer país de mayor dimensión geográfica en África, comenzó a mediados de abril del 2023. Se trata de un choque entre el ejército, liderado por el general Abdel-Fatah al-Burhan, y las Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF), una milicia paramilitar comandada por el general Mohammed Hamdan Dagalo.
Desde las primeras semanas del conflicto la crisis humanitaria en ese país se fue convirtiendo en una de las más graves del mundo. Además de las decenas de miles de muertes y personas heridas, la guerra ha devastado áreas civiles, incluyendo la capital, Jartum, y en Darfur, se acusa a la RSF y sus aliados de limpieza étnica. El conflicto ha provocado el mayor número de desplazados internos a nivel mundial, con alrededor de 10.7 millones de personas que han huido de sus hogares. Además, 2.3 millones han cruzado a países vecinos como Chad, Sudán del Sur y Egipto. Todas las negociaciones de paz mediadas por actores como Estados Unidos y Arabia Saudita han terminado por caer.
La posición geográfica y los recursos naturales de Sudán, como el Nilo y sus minas de oro, lo convierten en un actor clave en la geopolítica regional, atrayendo actores regionales y globales que le convierten en uno de los mayores focos de competencia en el mundo.
3. Myanmar. El golpe militar en 2021 liderado por el ejército, desencadenó una ola de protestas masivas y una fuerte represión. El ejército se aprovechó de la pandemia y de la rivalidad geopolítica entre EU, China y Rusia, pero las protestas se tornaron violentas y posteriormente se desató una guerra civil.
Esta guerra ha causado miles de muertes civiles y ha desplazado a más de tres millones. El ejército ha sufrido considerables derrotas y la realidad actual es que el país está fragmentado, con amplias áreas bajo control de grupos armados étnicos que están formando estados autónomos. Aún así, la dimensión internacional del conflicto necesita complejizarse. Por ejemplo, China ha decidido establecer vínculos tanto con la junta militar como con varios grupos rebeldes.
En fin, hay mucho más que decir sobre estos temas, y sobre muchos otros que no toco ahora. Seguiremos haciendo el intento de ir hablando de ellos, poco a poco.
Mauricio Meschoulam
X: @maurimm