Quién lo iba a decir…
QUIÉN lo iba a decir: Benito Juárez y Francisco I. Madero terminaron como floreros, como simple decoración --y no inspiración-- del gobierno de Andrés Manuel López Obrador.
Y ES QUE el presidente flaco favor le hace a la memoria de sus próceres consentidos, ya que en los hechos contradice sus postulados.
Por ejemplo, mientras Juárez es recordado por haber separado al Estado del control de la iglesia, en el México de AMLO todavía no hay libros de texto pero ya hay Cartilla Moral y, ¡Ave María Purísima!, la están repartiendo grupos religiosos.
TAMBIÉN está Madero que pasó a la historia por enarbolar el sufragio efectivo y en cambio el presidente avala que se pase por encima de la ley, comprando diputados, para que se alargue de dos a cinco años el periodo de Jaime Bonilla, pese a que le dieron el voto sólo para dos años.
Pero, bueno, la culpa de todo es de los gobiernos anteriores.
*****
POR CIERTO que una vez que el Financial Times se disculpe por decirle al Presidente que debe hacer caso a la realidad y no a “otros datos”, habrá que exigirle al Banco de México que organice una misa de desagravio.
Y es que su diagnóstico de que la desaceleración es mayor a la anticipada nomás no cuadra con las alegres cuentas oficiales.
Y eso, ya se sabe, es imperdonable.
*****
MUY CERTERO se vio Marcelo Ebrard al participar en la instalación del Consejo de Diplomacia Turística, pues dijo que en el extranjero se promueven más las series de narcos, que los destinos turísticos mexicanos.
Lo único que se le olvidó decir al canciller fue que a quien se le ocurrió eliminar los recursos de promoción fue... ¡a este gobierno!
POR CIERTO que en la ceremonia, por alguna extraña razón, en las primeras filas sentaron a los presidentes municipales invitados, en tanto que a los representantes del sector turístico los mandaron a gayola.
¿Será que necesitaban porra?
Es pregunta que no toma vacaciones.
*****
ESTO NO puede ser coincidencia: Alejandro González Durán era secretario de Estudio y Cuenta del magistrado José Luis Vargas y dejó esa posición para ser asesor de Jaime Bonilla en sus alegatos... ¡ante el Tribunal Electoral!
Hay quienes creen que el conspicuo asesor podría ser quien estuvo detrás de la sucia maniobra de Bonilla para extender su mandato de dos a cinco años.