Arranca la sucesión en Sonora
El PRI de Sonora dio la voz de arranque en su carrera por conservar la gubernatura en las elecciones del 2021, fecha que parece lejana pero que en el calendario político está prácticamente a la vuelta de la esquina.
La llegada a la presidencia del tricolor de Ernesto “Pato” de Lucas indica que finalmente el mando del partido se ha trasladado al palacio estatal en lugar de la ciudad de México como ocurría en años anteriores.
Y con la designación de Kitty Gutiérrez Mazón como secretaria general se evidencia que la tónica priista será apostarle a la juventud y a la labor comunitaria en donde los dos nuevos dirigentes tienen experiencia y camino andado.
Hace pocas semanas tocó al PAN renovar su dirigencia y ahora es el PRI el que intenta recuperarse del nocaut recibido en las elecciones del pasado mes de julio para reposicionarse con miras al próximo periodo electoral.
Será muy difícil para los antes partidos dominantes –PRI y PAN—ganar la gubernatura y recuperar las principales alcaldías en el 2021 ante el tsunami llamado Morena que arrasó no solamente en Sonora, sino en prácticamente todo el país.
Los priistas tienen la ventaja de controlar el gobierno estatal lo que no es poca cosa en una entidad de 72 municipios donde todavía mantienen sus cuadros y la estructura.
Lo más importante para Lucas será inyectar ánimo al priismo y convencerlos de que con todo y la hegemonía morenista a nivel nacional será posible obtener un triunfo que desde ahora se antoja milagroso, pero no imposible.
En segundo lugar, la nueva dirigencia deberá limar asperezas y curar heridas entre los bandos tricolores que al paso del tiempo han quedado divididos y muy resentidos.
Grupos comandados por apellidos tan conocidos como Bours, Beltrones, Gándara, Pavlovich, López Nogales, entre otros, tendrán que ponerse de acuerdo en las estrategias políticas y en la selección de candidatos.
El PRI tendrá que seguir muy de cerca el desempeño del gobierno de López Obrador y de los sonorenses más encumbrados a nivel nacional y regional como Alfonso Durazo, Lilly Téllez, Ana Gabriela Guevara, Jorge Taddei, etcétera.
Pero más importante todavía será la selección de un candidato para gobernador con popularidad, arraigo, experiencia y honesto a carta cabal.
Que no surja de la cúpula tricolor sino de las bases ciudadanas, en pocas palabras que sea capaz de rebasar a Morena por su brillo propio.
En el PAN el panorama está más complicado por el gobierno fallido de Guillermo Padrés y por el profundo bache en el que cayó el antes vigoroso blanquiazul.
Pero tampoco hay imposibles y más todavía si el nuevo dirigente Ernesto Munro logra revivir las glorias del pasado e impulsar a figuras con credibilidad y carisma que todavía tiene el PAN en sus filas.
¡Arranca, pues, la sucesión a la gubernatura por Sonora!
Culiacán, un fenómeno
Hacía por lo menos quince años que no visitábamos Culiacán, la flamante capital de Sinaloa nos dejó impresionados por su limpieza, modernidad, su tranquilidad y especialmente por la hospitalidad de su gente.
En ningún momento advertimos signos de violencia y de la narco cultura que tanto se menciona.
Por el contrario, conocimos a personas dedicadas a su trabajo profesional, a sus familias y al desarrollo de una ciudad que es ejemplo por las empresas que destacan a nivel nacional como Coppel, SuKarne, Ley, entre muchas otras.
Se dice que Culiacán es muy seguro porque está cuidada por el Cártel de Sinaloa, sea verdad o mentira lo cierto es que en restaurantes, avenidas y centros sociales es posible convivir en paz sin la presencia de escoltas, policías o personas armadas que enrarecen el ambiente.
El chisme del momento en Culiacán es el posible regreso de Maradona para continuar la dirección del equipo Dorados.
La gente vio con agrado el desempeño del argentino con todo y que no estuvo exento de sus parrandas y escándalos públicos.
Pero sin duda el ídolo predilecto de los “culichis” es Julio César Chávez y no sólo por su gloriosa carrera boxística sino porque ahora está dedicado a apoyar la recuperación de personas adictas a las drogas y el alcohol.
Dos de las casas donde Julio César vivió las ha transformado en albergues para rehabilitar a adictos en una labor por demás generosa y ejemplar.
Si usted viaja pronto por Culiacán no deje de visitar el Jardín Botánico, el parque de las Riberas, el desarrollo de los Tres Ríos, la playa de Altata y sus tantos restaurantes típicos, uno que le recomendamos ampliamente es “El. Que. Cvi.che”.
