Continúa la novela de Christian Horner, jefe de Red Bull

Tras ser suspendida de su puesto en el equipo de las bebidas energéticas, la persona que demandó al mandamás por conducta inapropiada.

Tras ser suspendida de su puesto en el equipo de las bebidas energéticas, la persona que demandó al mandamás por conducta inapropiada, interpuso una queja ante el comité de ética de la Federación Internacional de Automovilismo, según revela la BBC.

Aunque el líder de la escudería de Milton Keynes fue absuelto de toda acusación el 28 de febrero pasado, unos días antes (2 de febrero), la involucrada presentó su descontento ante la máxima autoridad del deporte motor en la que expresaba su preocupación por un posible encubrimiento de la franquicia.

Sin embargo, ante la nula respuesta de la FIA, la empleada volvió a protestar el 6 de marzo mencionando información de la queja anterior y advirtiendo que revelaría más datos a los medios de comunicación.

Red Bull no estaba enterado de las acciones que realizó por su cuenta la denunciante, así que no pudo intervenir, y el organismo se limitó a la resolución interna del equipo.