Piqué llora durante su declaración en el juzgado por caso Supercopa
El exfutbolista expresó que las acusaciones en su contra han afectado gravemente su reputación y aseguró que en otro país le habrían hecho una estatua por el logro que representó el contrato.
Este viernes, el exjugador del FC Barcelona Gerard Piqué compareció ante el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Majadahonda, donde negó haberle pagado a Luis Rubiales, expresidente de la Real Federación Española de Futbol (RFEF), o a la entidad al participar como intermediario en el traslado de la Supercopa de España a Arabia Saudita.
El caso inició con la denuncia del Sindicato Manos Limpias, organización que reveló grabaciones filtradas de conversaciones entre Rubiales y Aleksander Ceferin, presidente de la Unión de Federaciones Europeas de Futbol (UEFA), que indicarían corrupción en los negocios y tráfico de influencias.
Los audios revelan que en 2020 hubo una reunión virtual que contó con la participación de Piqué, Lionel Messi, Rubiales y Ceferin para afinar detalles del desvío de fondos de la UEFA para presuntamente compensar la reducción salarial de los fubtolistas del FC Barcelona durante la pandemia por Covid-19.
Defienden regularidad en contrato
El pasado jueves, el abogado de Piqué presentó un escrito ante el juzgado en el que adjuntó 15 facturas emitidas por Kosmos, la empresa del jugador, a la Federación de Futbol de Arabia Saudita por un monto total de 12 millones de euros, además de comprobantes bancarios y una serie de correos electrónicos, informó Euro Press.
De acuerdo con el abogado, estos documentos serían evidencia de la normalidad en la relación contractual y aceptación de servicios de intermediación prestados.
Orgulloso de obtener el mejor contrato de la RFEF
Hoy, Piqué testificó durante dos horas frente a la jueza, el fiscal y su abogado, a quienes les aseguró que la comisión de 4 millones anuales, pactados por Kosmos con una empresa pública saudí por el contrato que firmó para llevar la Supercopa al país árabe, no cuenta con irregularidades.
Además, se mostró orgulloso de haber conseguido lo que consideró "el mejor contrato de la RFEF", el cual no habría sido acordado sin la participación de su empresa.
Hacia el final de su intervención, Piqué rompió en llanto al expresar que las acusaciones en su contra han dañado profundamente su reputación.
"No saben el daño que me hace esto. En otro lugar tendría una estatua", consideró visiblemente afectado, según medios españoles.
El exfutbolista se negó a dar declaraciones ante la prensa al llegar e irse del Juzgado.