“Me ha recibido con cariño”: Nodal habla sobre Pepe Aguilar

El sonorense habló por primera vez sobre cómo es su relación con el padre de su esposa Ángela Aguilar.

Christian Nodal finalmente rompió el silencio para hablar sobre cómo es su relación con Pepe Aguilar después de que se casó con su hija Ángela Aguilar el pasado 24 de julio. 

El intérprete de ‘Adiós Amor’ se encuentra de visita en Puerto Rico donde ofrecerá este fin de semana tres presentaciones en el Coliseo de Puerto Rico en San Juan y durante su estancia en este país, el sonorense fue cuestionado sobre cómo convive con su ahora suegro.

En esta charla con Molusco TV, Nodal explicó que a pesar de que muchos perciben al padre de su esposa Ángela Aguilar como un “monstruo”, la realidad es que el patriarca de la Dinastía Aguilar es una persona muy “empática”: “Todo el mundo lo tiene como un monstruo, ¿por qué?, no sé”, comentó. 

Además, el cantante de 25 años compartió que Pepe ha sido “súper bueno” con él: “Es una persona que ha sido muy empática. Uno como papá siempre quiere lo mejor para las hijas y bueno, yo estoy con su tesoro, básicamente con una de las personas más bellas que tiene en su vida, y de sus amores más grandes”, mencionó. 

“Me ha recibido con mucho amor, cariño y respeto", comentó Nodal. “Amo estar en una familia que se respira tantas cosas tan chingonas como el amor, cultura, experiencias tantas cosas, Pepe es un gran tipo”, añadió. 

El originario de Caborca reconoció que no se había considerado la posibilidad de tener una relación más cercana con el intérprete de ‘Perdóname’ y reafirmó que su suegro es “un gran tipo”.

“Pepe es de dos metros, intimidante, yo lo veo y raramente se ríe. No sé, nunca me encargué de visualizar a Pepe como ‘ese señor va a ser mi suegro’, entonces creo que hay una perspectiva muy diferente a la realidad, es un gran tipo”.

Desde su boda con Ángela Aguilar, los rumores apuntaban a que Pepe no habría estado de acuerdo con el matrimonio e incluso que obligó al sonorense a firmar un acuerdo prenupcial para no serle infiel a su hija ni separarse de ella en los próximos tres años.