¿Cuántos hermosillenses toman agua de la llave? Ojo con el dato y los riesgos

HERMOSILLO, SON.- En Hermosillo, el 87.3% de los ciudadanos no utiliza el agua de la llave para beber y de este porcentaje, el 96% cubre la necesidad del vital líquido con el consumo de agua purificada en garrafón, informó María Elena Vega Amaya, académica de El Colegio de Sonora.

La investigadora, especialista en temas del agua, explicó que tal fenómeno es relativamente reciente ya que el 71% de los consumidores de agua en garrafa, en promedio, hace 20 años no compraba el líquido en tal presentación.

Precisó que la desconfianza ha crecido debido a la falta del manejo de la calidad del agua por los casos de contaminación de ríos, sobreexplotación de acuíferos, así como, se debe también a la mala administración, gestión y opacidad de los organismos operadores del agua.

“El mercado de agua purificada ha encontrado una oportunidad de arraigo en la necesidad de los usuarios de contar con agua segura, los cuales están dispuestos a pagar por el agua que se ofrece embotellada, principalmente, en contenedores reusables de 20 litros mejor conocidos como garrafones”, dijo.

Vega Amaya puntualizó el consumo de agua embotellada como sustitución de la de la llave para beber es un fenómeno que comenzó a aparecer y a discutirse al inicio de la década de los noventa.

Hasta 2016, el Directorio Estadístico Nacional de Unidades Económicas (DENUE) identificó un total de 319 establecimientos que se distribuyen homogéneamente dentro del polígono urbano de la capital sonorense, indicó la especialista.

De acuerdo a información tomada del sitio web del organismo Agua de Hermosillo, la institución se apega a los ordenamientos de las normas oficiales correspondientes para su cumplimiento y así, operar.

Refirió que se apegan a la Norma Oficial Mexicana NOM-127-SSA1-1994, de Salud ambiental, enfocada en agua para uso y consumo humano y que indica los límites permisibles de calidad y tratamientos a los que debe someterse el agua para su potabilización.

También a la Norma Oficial Mexicana NOM-179-SSA1-1998, enfocada en la vigilancia y evaluación del control de calidad del agua para uso y consumo humano, distribuida por sistemas de abastecimiento público.

En el texto se citó: “Agua de Hermosillo, se apega a todos los ordenamientos de las normas correspondientes, para su total cumplimiento y para ello, cuenta con un laboratorio de análisis del agua”.

El organismo detalló que el proceso consiste en toma de muestras diariamente siendo 7 colonias al norte y 7 al sur de Hermosillo, las cuales se rotan para lograr analizar cada zona y asegurar que el agua mantenga las condiciones correctas para su uso potable.

Señaló que para análisis especializados, como son los de materiales pesados y arsénico y que se realizan cada 6 meses, según marca la norma, y para estos se utilizan los servicios de laboratorios externos en Hermosillo, como el laboratorio del sector privado que está autorizado por la entidad mexicana de acreditación y por la Comisión Nacional del Agua (Conagua).

Así como, en un laboratorio más del sector privado situado en la Ciudad de México que cuenta con la acreditación de la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitario (Cofepris).

Por último, se solicitó a la Secretaría de Salud en la Entidad una entrevista a la Comisión Estatal de Protección Contra Riesgos Sanitarios del Estado de Sonora (Coesprisson) para conocer detalles sobre los procedimientos o análisis que desarrollan en establecimientos relacionados a la venta de agua en garrafón pero se obtuvo respuesta nula.

En un sondeo realizado con los ciudadanos en la capital sonorense, la mayoría manifestó utilizar el agua de garrafón, entre las razones mencionadas fue desconfianza al agua potable, la practicidad al comprar agua embotelladao porque prefieren el sabor de agua en garrafón o en botella, entre otros.